Alumbrar
basado en materiales de Majón Meir
Parashat Balak
7 de Tamuz 5774 No
975
Rav
Iaacov Filver (reimpresión)
Balak le pidió a Bilam que lo salve
maldiciendo a Am Israel (el Pueblo de Israel), ya que se
sentía
amenazado por él en ese momento. Pero Bilam sabía que la
contienda con Am
Israel no se limita a una generación o un líder
determinado; Am Israel
es un fenómeno histórico, y por lo tanto, él debe
procurar atacar el trayecto histórico
del pueblo judío - "de las bendiciones que dijo ese malvado,
aprendemos
qué maldiciones pretendía decir" (Rashi). Es por eso que
las bendiciones
de Bilam se refieren al trayecto histórico del pueblo
judío, desde los
patriarcas hasta los días del Meshiaj (El Redentor).
Dejaremos de lado
la cuestión si Bilam era profeta - como él mismo dice,
"la palabra
profética del que oye los dichos de D's, y entiende la ciencia
del
Altísimo" (Bamidvar 24:16) - o si era un adivino - como es
apodado en el
libro Ioshua (13:22); "Bilam,
hijo de Beor, el adivino". De una forma u otra, está claro que
tenía
poderes sobrenaturales, y supo predecir lo que ocurrirá hasta el
fin de los
días. De acuerdo a esa orientación comenta el Ramba”n
(Comentario a
Rabí Arie
Leiv, el hijo del Jafetz Jaim, relata en su libro "Mijtavei Jafetz
Jaim" (en el capítulo de las charlas con el Jafetz Jaim,
Pág. 28):
"Cuando el gobierno de Inglaterra declaró
De las
palabras del Jafetz Jaim aprendimos, entonces, dos cosas: En primer
lugar, que
la gueulá puede revelarse
también en forma natural, y lo segundo, que los acontecimientos
que ocurren en
nuestra época están relacionados con la gueulá "en
su momento", de la que habló el Or HaJaim en su comentario a
nuestra Parashá, que el Jafetz Jaim relacionó con
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Director de Majón Meir
Bilam
Rav David
Landau
En Pirkei Avot (Avot 5:19) es definida
la personalidad de Bilam
como la antítesis de nuestro patriarca Avraham. “Todo el que
tiene estas tres
cosas – es de los discípulos de nuestro patriarca Avraham”. La
primera virtud,
es Ain Tova – buena mirada, simpatía. Es simpatía
para con las
criaturas, todas las criaturas. Hay distintos niveles de
criaturas, hay Am
Israel (el Pueblo de Israel) y los gentiles, pero para con todos
existe una
vinculación con El Creador. ¿De dónde le llega a
nuestro patriarca Avraham, “la
persona gigante entre los gigantes”, esa bondad de corazón? No
es un asunto
particular, individual, sino que la continuación de Ain Tova
para con El
Creador, y del Creador a la creación. “Ama a D’s, ama las
criaturas” (Avot 6).
En base a la cercanía y la vinculación con D’s de ese
alma Divina, en base al
conocimiento claro que “el Eterno es bueno para con todos”,
continúa la vinculación
con toda la creación, amor por todas las criaturas y el deseo de
abrazar y
besarlo todo.
La primera virtud de las virtudes de Israel es: Misericordiosos. Es
mencionado en
En contraste, “todo el que tiene misericordia por las criaturas es
sabido que es de la descendencia de nuestro patriarca Avraham”. Todo
eso nos
llega de nuestro patriarca Avraham, como dice el profeta Ishaya: “Mirad
a la
roca de donde fuisteis cortados… mirad a Avraham, vuestro padre”
(Ishaya 51:1).
De nuestro patriarca Avraham nos llega la buena mirada para con todas
las criaturas.
En esa misma Mishná encontramos la antítesis a
El hombre de la maldición se dispone - con su elevada y enorme
fuerza
espiritual, parte de su esencia y naturaleza - a maldecir a Am
Israel.
Pero no le es permitido, porque Am Israel “es bendito”
(Bamidvar 22:12).
Ese pueblo - que es la continuación del camino de nuestro
patriarca Avraham, la
persona de la bendición – no puede ser maldito. “El Eterno de
Israel no
mentirá”. “El Eterno, tu D’s, convirtió la
maldición en bendición” (Dvarim
23:6. Según Sijot HaRav Tzvi Iehudá, Bamidvar pág.
270-271, 294-299).
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