Alumbrar
basado en materiales de Majón Meir
Ser
libres
Rav
Ioram Eliahu
Luego de
unos 200 años de esclavitud y sufrimiento,
los Hijos de Israel salen a la libertad, como decimos en el rezo “y
sacó Su
pueblo Israel de entre ellos a una libertad eterna”. Eso es lo que
esperaron y
anhelaron, y por ello se alegraron y agradecieron a D’s. Y de ello
aprendemos
que no hay algo más elevado y maravilloso que la libertad, lo
que es conceptuado
como una situación en la que la persona puede hacer todo lo que
desea y nadie
le dice qué hacer.
Pero en la Torá
encontramos que D’s dice
(Vaikra 25:55) “pues los Hijos de Israel son siervos para Mí,
ellos son Mis
siervos que saqué de la tierra de Egipto, Yo soy el Eterno, D’s
de ustedes”.
Entonces, hay algo bueno en la esclavitud, y es un mérito ser
esclavo de D’s.
El Rav Kuk
en Olat Reaya (Bet, pág. 245) escribe
que “la diferencia entre el esclavo y la persona libre no es
sólo una
diferencia de su estatus, que por alguna circunstancia este es
esclavizado y este
otro no. Podemos encontrar un esclavo culto cuyo espíritu
está colmado de
libertad, y al revés, una persona libre cuyo espíritu es
un espíritu de
esclavo. El carácter de la libertad es ese alto espíritu
de la persona, y
también del pueblo en general, a través del cual se eleva
a ser fiel a su
independencia interna, a la esencia de la imagen y semejanza Divina
dentro
suyo, y de esa forma puede sentir su vida como una vida con sentido,
que vale”.
Cuando la persona es fiel a su esencia interna, cuando sabe y entiende
que la única
persona libre es la que se ocupa de la Torá, cuando hay
un sentido y la
meta de su vida le es clara, entonces vive una vida de libertad e
independencia. Entonces no es un esclavo de sus pasiones, sino que es
fiel a lo
que realmente desea ser, porque para ello fue creado.
Y
así nos enseña el Rav Tzvi Iehudá Kuk en sus
charlas
(Sijot HaRav Tzvi Iehudá, Mishpatim, pág. 218): “Lo
primero es el anulado de la
esclavitud y determinación de la libertad, ¡somos libres!
Somos un pueblo de
esclavos liberados, desde ese entonces para todas las generaciones”. La
esclavitud
es un deterioro de la esencia humana. El ser humano es la persona
plena, sana y
normal, sólo si es independiente – pero ¿a qué
independencia nos referimos?
Dice el Rav Tzvi Iehudá : “La independencia de la persona debe
expresarse en
base a la imagen y semejanza Divina de la persona, en base a la
potencia de la
persona, la kdushá de la persona, en base al raciocinio
de la persona
que emana de la fuente, entonces se revela como una persona de Israel,
como una
persona de Torá”.
El Rav Kuk
escribe que puede darse una situación en
que la persona es esclava pero su espíritu está colmado
de libertad porque es
fiel a su esencia propia, tiene fe en sus acciones, en su camino, que
emana de
la imagen y semejanza Divinos dentro suyo. Esa maravillosa idea tiene
su
expresión en las palabras de Anatoli Sharanski, Cautivo de
Tzion, al juez que
lo juzgo en Rusia: “Usted, señor juez piensa que es una persona
libre. Usted
piensa así de momento que luego del juicio marchará a su
casa, mientras que yo
iré a la cárcel por largo tiempo. Pero debe saber que de
entre nosotros dos, ¡yo
soy el libre autentico! Es cierto que mi cuerpo será
esclavizado, pero mi espíritu
permanecerá libre, ya que sentiré que no me he dejado
doblegar por los decretos
y permanecí fiel a mi fe. Pero a usted le han determinado de
antemano qué
decir. Su cuerpo es libre, pero usted no es libre de decidir
según su creencia,
su espíritu está esclavizado y eso es mucho más
severo” (Lo Ira Ra). Y cuando
le preguntaron cuáles son las ultimas palabras que quiere decir
antes que lean
el veredicto, dijo “el año que viene, en Ierushalaim”.
En base a esa
certeza interna fue merecedor de llegar a la Tierra de Israel e incluso
ser un
ministro en el gobierno de Israel.
Adoptaremos
esa independencia, y seremos merecedores
de actuar con D’s, ver a Ierushalaim y el Beit HaMikdash
(El
Templo) reconstruido pronto, en nuestros días. Jag Sameaj (feliz
fiesta).
El
remedio
Rav
Shlomó Aviner
Pregunta: Estamos
asustados por lo que ocurre en nuestro país: Bloqueado de
calles, negado de
oficiales de alto rango, choque del gobierno contra el jurado.
¿Qué será? ¿Cómo
nos fortalecemos en esa situación?
Respuesta:
1. Gracias
a D’s que estás asustado. Eso es
señal que tienes Ahavat Israel (amor por todos los
miembros del Pueblo
de Israel), y toda fraccionado te duele. Pero debes saber que todos
estamos
asustados, y es buena señal que todos amamos nuestro pueblo.
2. Y por
supuesto, el remedio para el
fraccionado es añadir Ahavat Israel, amor gratuito, amor
sin límites,
amor racional, amor emocional, amor práctico. Todos los amores
posibles. Amor
fraternal.
3.
Tú eres joven y no recuerdas lo que
ocurrió en la época del primer Beit HaMikdash (El
Templo) cuando teníamos
dos reinados, y a veces luchaban entre ellos, y hubo una batalla en la
que
murieron medio millón de soldados. Y también en la
época del segundo Beit
HaMikdash. Y también fraccionamiento antes de la
declaración de la
independencia, y después de la declaración de la
independencia. Ahora la
situación es mucho mejor. Debemos ver las cosas con
proporción, y por supuesto
añadir amor.
4. Por lo
visto no recuerdas lo que pasamos
en la galut (el exilio): Expulsiones, pogromos, abusos,
asesinatos,
violados y más. Hay algunas peleas en la familia, a fuego bajo,
a fuego de un
fosforo. Debemos ver las cosas con perspectiva.
5.
También te has olvidado que en el principio
de la gueulá (Redención) hay problemas, hay
crisis. Es natural. Es ser
ingenuo pensar que no los habrá. Se necesita paciencia. Y por
supuesto que hay
que superarlos. ¿Cómo? Ya lo hemos dicho: Amor.
6.
¿Y qué es amor? Pensamiento profundo,
grande, pensamiento de verdad. El reconocimiento que lo que nos une es
mucho
mayor que lo que nos separa. Todos somos hermanos, todos somos un mismo
pueblo,
todos somos una misma alma, todos somos un resplandor Divino
único.
Meorot
HaShabat
El cometido
de esta sección es familiarizar a los lectores con las pautas
básicas
del Shabat. Cada uno debe aconsejarse con la autoridad rabínica
en su comunidad
en cuanto a los detalles de las numerosas y a veces complejas halajot
del Shabat,
y no limitarse a lo escrito en esta sección.
Orden a un
gentil en Shabat
Provecho de
otros
Si un
gentil hizo en Shabat alguna Melaja
para un judío, si esa Melaja está prohibida
según la Torá escrita
– por ejemplo, hirvió agua sobre el fuego o similar – todo
judío tiene prohibido
tener provecho de esa Melaja en Shabat [y
después del Shabat,
deberá esperar para que sea hecha], incluso si la Melaja
no fue hecha para
él[1].
Pero si el
gentil hizo en Shabat alguna Melaja
que está prohibida por nuestros sabios para un judío –
por ejemplo trajo frutas
que se encontraban fuera de la distancia que está permitido
andar en Shabat
– nuestros sabios no fueron más estrictos y sólo el
judío para el cual fue hecha
la Melaja tiene prohibido tener provecho de ella en Shabat[2],
pero los demás pueden tener provecho de ella[3].
No tiene
obligación de salir
Si un
gentil de por sí mismo decide hacer alguna Melaja
para un judío en Shabat en la casa de este, a pesar de
que fue aclarado
que nuestros sabios le prohibieron tener provecho de ella, de todas
formas no
lo obligaron a salir de su casa, y puede quedarse en ella[4].
Y de todas formas, acciones que el judío no podía hacer
anteriormente y sólo
por la Melaja que hizo el gentil para él puede ahora
hacerlas, tiene
prohibido hacerlas en su casa, ya que de esa forma tiene provecho de la
Melaja
que hizo el gentil[5].
Por
ejemplo: Si el gentil encendió de por sí mismo la
luz en la casa del judío, el judío no tiene
obligación de salir de la casa. Y
de todas forma, no debe leer algo en el cuarto donde el gentil
encendió la luz,
ya que antes del encendido no podía leer allí, y tiene
provecho de la Melaja
del gentil[6].
El
judío tiene permitido continuar en la casa, y no tiene
obligación de mirar en dirección contraria a la luz[7].
Y hay quienes escribieron que se debe ser más estricto y mirar
en otra
dirección[8].
Cuando el
gentil hizo la Melaja porque el judío
se lo ordenó, por ejemplo le pidió que prenda la luz, el
judío debe salir de su
casa, y no alcanza con que no tenga provecho de la luz que el gentil
encendió
para él[9].
[1](Shuljan Aruj, Orej Jaim 276 inciso
1).
[2]Y véase Mishná Brurá (325
inciso 38)
según lo que fue aclarado en 515 que cuando el gentil le trajo
al judío en
Shabat alimentos que se encontraban fuera del Tjum, le está
prohibidos al judío
para el cual fueron traídos y su familia, y también sus
invitados en ese
Shabat.
[3](276 Mishná Brurá inciso 3. Kaf
HaJaim inciso 1).
Y véase Pri Megadim
(allí, Mishbetzot Zahav inciso 5) que escribió que si el
gentil hizo la Melaja
a pedido del judío, tal parece que incluso tratándose de
una Melaja prohibida
por nuestros sabios le está prohibido también a todas las
personas. Véase allí.
[4](Allí, Ram”a). Y de todas formas
debe advertirle al gentil que no lo haga más (allí,
Mishná Brurá inciso 11).
También si el judío determina
su vivienda en la casa del gentil en ese Shabat, y el gentil hace
alguna Melaja
en el cuarto del judío, no tiene obligación de salir de
su cuarto (allí, Mishná
Brurá inciso 12. Kaf HaJaim inciso 22).
[5](Allí, Mishná Brurá inciso
13. Kaf
HaJaim inciso 20).
[6]Véase Biur Halajá (276 inciso 1
comienza asur) que escribió que está prohibido estudiar a
la luz de la vela. Y
así también Jaiei Adam (clal 62 inciso 6) y así
dice: “Y hay quienes dicen que
incluso según los que prohíben ordenarle a un gentil
encender la vela para
estudiar, cuando la enciende de por sí mismo está
permitido estudiar a su luz,
ya que las mitzvot no son para tener provecho. Y ya escribió
Riba”sh 387
citando al Ramba”n que ese argumento es válido tratándose
del tocado del shofar
o tvila como dice la Gmará, cuando el cuerpo no tiene
ningún provecho de eso,
pero cuando tiene provecho como estudiar o comer a la luz de la vela,
está prohibido,
ya que de todas formas disfruta. Y es sabido que el cuerpo disfruta de
la luz
de la vela también cuando estudia”.
[7]A no ser que desea hacerlo por Piedad
(allí, Mishná Brurá inciso 14. Kaf HaJaim inciso
21 citando a Maguen Avraham y
Beit Iosef).
[8](Allí, Mishná Brurá que tal
parece
como Rashb”a).
[9](Allí, Mishná Brurá inciso
13).
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