Alumbrar

basado en materiales de Majón Meir

Parashat Mishpatim     27 de Shvat 5783     Shabat Shkalim     1397 

Mishpatim
Rav David Landau

 

La Parashá Mishpatim es la continuación del acontecimiento en el monte de Sinai y la Entrega de la Torá, es la segunda parte de la Entrega de la Torá.

Las Parashot Itro y Mishpatim son generalidad y detalles. En Itro se encuentran las bases: Los Diez Mandamientos, en los que se encuentran insinuada toda la Torá. Y en base a ello, llega un gran pormenorizado de mitzvot en Mishpatim. Itro es una Parashá pequeña en cantidad, pero muy grande en calidad, mientras que Mishpatim es una Parashá mucho más grande en cantidad y detalles. La Parashá Itro habla de la Entrega de la Torá y el monte de Sinai, que también es un tema de por sí, “el lugar sobre el que estás parado es suelo santo” (Shmot 3:5). Bienaventurados somos que fuimos merecedores de estar en ese lugar en el episodio en el monte de Sinai. “Israel que se encontraron en el monte de Sinai” (Shabat 146A). Sólo en base a la pertenencia básica al episodio en el monte de Sinai se continúa de ello la Torá y sus mitzvot a nosotros.

Torá y mitzvot son generalidad y detalles - la Torá es la generalidad. Nuestros sabios mencionan en la Gmará (Brajot 5A) el versículo “porque una buena enseñanza les doy, no abandonéis Mi Torá” (Mishlei 4:2). En la Gmará (Shabat 105A) figura una expresión más aguda aún: “Yo Me escribí y Me entregué”. A Mí mismo – Me entregué con la Torá. La Torá y D’s son una misma cosa. Esas expresiones no son sólo palabras santas, lindas y agradables – son definiciones claras, auténticas y reales.

Fuimos merecedores, para nosotros y para todo el mundo, de un par de Parashot Itro-Mishpatim, que es una generalidad que se detalla. El tema de Itro es el episodio en el monte de Sinai, la Entrega de la Torá y su recibimiento, en forma general. Y una generalidad mayor que ella es toda la Torá, el alma de la Torá, el alma de Am Israel (el Pueblo de Israel), el alma de todas las mitzvot. Hay bibliotecas enormes en cuanto a la aclaración de las halajot, las 613 mitzvot, mitzvot de la Torá escrita, mitzvot de nuestros sabios, etc. Todo eso son detalles de la gran verdad de la Torá. La Torá es el alma de todas las mitzvot, y en base a ello es estrictamente necesario que ese elevado valor Divino se revele en los detalles de las mitzvot para con D’s y para con el prójimo. De la Parashá Itro – la generalidad de la Torá – se continua la realización y detallado pormenorizado: “Estas son las leyes que pondrás delante de ellos” (Shmot 21:1). Las leyes son las que ordenan las cosas en la realidad práctica. En base al episodio en el monte de Sinai, en base a la Torá y D’s que son uno, fuimos merecedores y junto con nosotros todo el mundo, y también los Cielos y la tierra, que la vida fue ordenada. En base a lo que se encuentra por encima del orden, se continua el ordenado de la vida en Am Israel y en el mundo, como el versículo que habla de Shimshón: “La ley del muchacho y lo que ha de hacer” (Shoftim 13:12). Luego de la aclaración de las leyes del ordenado de la vida normal y anormal, llegan los temas genéricos de la marcha a Ierushalaim en las fiestas y los sacrificios (según Sijot HaRav Tzvi Iehudá, Shmot pág. 227, 244-248, 255).

La revolución judicial
Rav Shlomó Aviner

 

Pregunta: ¿Acaso la revolución judicial que se planea ahora es buena? ¿Quién decide, el gobierno o el jurado?

Respuesta:

1. Antes que nada, hay que saber que según la Torá una corte que se dirige según las leyes de los gentiles está prohibida. “Estas son las leyes que pondrás delante de ellos” (Shmot 21:1). Rashi cita nuestros sabios: “Delante de ellos – y no delante de los gentiles. E incluso si sabes que con respecto a un determinado caso legal los gentiles juzgan del mismo modo que Israel, no lo presentes antes sus tribunales, pues todo el que presente los casos legales de un judío ante gentiles profana el Nombre de D’s y valoriza el nombre de la idolatría de ellos al concederle importancia”. Y en la Gmará (Guitin 88B): “Delante de ellos – y no delante de los gentiles”. Y el Ramba”m (Hiljot Sanhedrin 26:1) escribe: “Todo el que juzga según las leyes de los gentiles o en sus jurados, a pesar de que fallarían como Israel, es un malvado, y es como si hubiese insultado y se hubiese rebelado frente a la Torá de nuestro Rav Moshé, como dice el versículo ‘estas son las leyes que pondrás delante de ellos’, y no delante de gentiles”. Un juez que juzga según las leyes de los gentiles piensa que las leyes que los gentiles inventaron son mejores que la Torá de D’s. Pero por supuesto, no cabe hoy en día clausurar los jurados, habrá una andarla musía, y no podremos proteger a los oprimidos. Pero debemos saber que se trata de una situación pasajera, y rezamos “devuelve nuestros jueces como en un principio”.

2. Según la Torá, si hay alguna diferencia de opinión entre el Sanhedrin (Suprema Corte) y el rey, por supuesto que la halajá es determinada según el Sanhedrin, ya que el Sanhedrin juzga según la palabra de D’s, y cuando hay alguna diferencia de opinión entre el alumno y el maestro, por supuesto que se acata al maestro, que es D’s (Ramba”m, Hiljot Melajim, cap. 3). Por supuesto, no es semejante a nuestro caso, porque las leyes de las que estamos hablando no son la palabra de D’s sino que de personas, y cambian de un país al otro, e incluso en nuestro país de vez en cuando, y no tienen un valor absoluto.

3. Ya escribió el filósofo francés Montesquieu en su libro “El Espíritu de las Leyes” que en la dirección del estado se necesitan tres poderes: Legislativo, gubernamental y judicial – es decir, Kneset (Parlamento), gobierno y cortes judiciales, y se necesita un equilibrio entre ellos. Es muy difícil definir ese equilibrio, y es diferente en cada país, e incluso en un mismo país puede cambiar, y no tiene un valor absoluto.

4. Según la Torá, cuando no hay un rey, el pueblo es el rey, él nombra a los parlamentarios, y en forma indirecta al gobierno, y también los jueces, y determina las leyes según las cuales deben juzgar las cortes judiciales, por supuesto a condición de que no sean contrarias a la Torá.

5. Hoy en día en nuestro país toda la autoridad de los jurados emana del pueblo, y por ello no puede ser que desacuerden con él. Pero, por supuesto, ellos también deben proteger al ciudadano oprimido por el gobierno, si su comportamiento es contrario a la moral básica genérica humana, y también la moral israelí singular nuestra.

6. Pero el jurado no puede colocarse como legislador de la nación, inventar leyes, o inclinar leyes según su concepción, sino que debe fallar según la intención del legislador, que es la nación.

7. Hace muchos años hubo un cambio, el “activismo judicial”, que no es más que una dictadura del sistema judicial nacional. Y ahora hay intención de corregirlo, y es una bendición. El juez no debe inclinar el fallo según su concepción particular, sino que dirigirse según la intención de la nación.

8. Hoy en día, lamentablemente, el sistema judicial se inclina por un “Estado de sus Ciudadanos”, lo que es contrario a la voluntad de la gran mayoría de la nación, que desea un “Estado Judío”. Y de esa forma se comporta como un “estado dentro de un estado”, que tira de los hilos en forma oculta.

9. Es más, los jueces no son elegidos por el pueblo o sus representantes, sino que por los jueces mismos, de forma que preservan el gobierno según su concepción.

10. En resumen, el que determina es el pueblo. Nuestro querido Am Israel (Pueblo de Israel), que se sacrificó por la edificación del estado, y todavía se sacrifica, y él tiene la última palabra. 

Meorot HaShabat

El cometido de esta sección es familiarizar a los lectores con las pautas básicas del Shabat. Cada uno debe aconsejarse con la autoridad rabínica en su comunidad en cuanto a los detalles de las numerosas y a veces complejas halajot del Shabat, y no limitarse a lo escrito en esta sección.
Medicina en Shabat

Gimnasia en Shabat

No se debe hacer ejercicio físico en Shabat[1]. Es decir, está prohibido en Shabat doblar y enderezar los brazos adelante y atrás para que el cuerpo se caliente y sude[2].

La razón es porque esas acciones son parte de lo que nuestros sabios prohibieron hacer en Shabat como medicina, por el decreto de la prohibición de moler medicamentos[3].

Así también está prohibido en Shabat correr para calentarse y sudar como cura, por el decreto de la prohibición de moler medicamentos[4].

Está permitido pasear en Shabat [5], incluso si su intención cuando camina es hacer gimnasia y calentar su cuerpo como cura. Porque justamente correr para curarse fue prohibido, porque es evidente que lo hace para curarse, lo que no es así cuando camina. Y hay quienes son más estrictos y prohíben pasear cuando su intención es hacer gimnasia, cuando toda su intención es curarse[6].

Masajes

Hay poskim (sabios que determinan la halajá) que dudan en cuanto a los masajes que hacen a personas doloridas o cansadas para confortarlos y hacerlos sentir menos cansados, si esa acción es considerada medicina y está prohibida en Shabat. Y escribió Mishná Brurá que según lo que escribieron los poskim, que incluso una persona sana que hace alguna acción que es considerada medicina para fortalecerse está prohibido[7], también en ese caso se debe prohibir[8].



[1](Shuljan Aruj, Orej Jaim 328, inciso 42).
[2](Allí, Mishná Brurá inciso 129. Kaf HaJaim inciso 236).
Y véase Biur Halajá (allí, comienza sheiiga veiazia) que Rashi explicó la Mishná que no se hace gimnasia en Shabat, es decir, hacer masajes con fuerza, y tal parece que está prohibido incluso si no suda. Y en el Shuljan Aruj (327 inciso 2) determinó según ello que no manosee su cuerpo con fuerza, sino que suavemente. Y Biur Halajá citó Eliha Rabah que se debe determinar como el Ramba”m, que sólo si suda estará prohibido. Y muchos poskim de nuestros días hablaron de la prohibición de hacer gimnasia en nuestra época [que no se hace para sudar]. Y véase Maguen Avraham que prohíbe incluso tratándose de una persona sana que lo hace para fortalecer su cuerpo.

[3](Allí, Mishná Brurá inciso 130. Kaf HaJaim allí). Y a pesar de que el decreto de nuestros sabios es para evitar que llegue a moler medicamentos, y tratándose de gimnasia no se lo debe temer, pero de momento que a veces se le dan medicamentos al enfermo para que sude, por ello fue prohibido hacer gimnasia y sudar, no sea que llegue a darle remedios para sudar (allí, Mishná Brurá y Kaf HaJaim inciso 237).
[4](301, Mishná Brurá inciso 7. Kaf HaJaim allí, inciso 13 citando a Maguen Avraham).
[5](Allí, Beit Iosef. Fue citado por Ram”a, inciso 2).
[6](Allí, Mishná Brurá inciso 7. Kaf HaJaim inciso 13).
[7](Maguen Avraham allí, inciso 43).
[8](328, Mishná Brurá inciso 130). Y a veces se hace eso utilizando remedios, y por ello se debe ser más estrictos (allí, Shaar HaTziun inciso 97).

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