Alumbrar
basado en materiales de Majón Meir
Arder
tras ella
Rav
Ioram Eliahu
Es sabido el maravilloso comentario del Or HaJaim al
versículo de
nuestra Parashá “y te regocijarás en todo lo
bueno que el Eterno, tu D’s,
ha concedido a ti” (Dvarim 26:11). “También insinúa
diciendo todo lo bueno a la
Torá… que si las personas sintiesen la dulzura y el
agrado de la Torá
se enloquecerían y arderían tras ella, y un mundo
lleno de plata y oro les
parecería insignificante. Porque la Torá incluye
todas las bondades del
mundo”.
Bien expresó el Rav Kuk esa sensación escribiendo: “Un
relámpago de
fulgor brilla en los ojos por la grandeza y la dicha de la Torá.
Cuánta
potencia y magnificencia, cuanta luz surge cuando se ocupa de alguna
forma de
ella”. El Rav recalca: Toda ocupación de la Torá,
el brillo de la Torá,
la dicha que se encuentra en ella, es para todos los que se ocupan de
ella, los
que la estudian, en todo campo. La lectura misma de los
versículos de la Torá
o el Tana”j (La Biblia), todo estudio de alguna Mishná
o halajá,
en todos los niveles de comprensión, hasta los que se ocupan de
ella con gran profundidad.
Hay en esa idea una gran enseñanza. Hay quienes piensan que el
estudio
de la Torá le pertenece a los talmidei jajamim
(eruditos del
estudio de la Torá), los sabios y genios, que comprenden
todas las
palabras de ella con profundidad, por dentro y por fuera. Pero no le
pertenece
a la persona sencilla, ella no sabe profundizar, encontrar
contradicciones y
llegar a resolverlas, no sabe estudiar Gmará con
profundidad. Por ello,
dice el Rav que de toda ocupación de la Torá,
surge un relámpago singular
que genera dicha y potencia para el que la estudia. Y así
acostumbraba a decir
el Rav Tzvi Iehudá Kuk: “El estudio de la Gmará
no es para que seas
llamado ‘Rav’, sino que para ser un buen judío”. Agrega el Rav
Kuk y dice que “el
conocimiento de la Torá que es asimilado en el
principio, le sirve en
todo momento difícil, hasta que le asegura dicha y placer”.
El estudio de la Torá arma a la persona con fuerzas para
toda su
vida, para hacerle frente a todo momento difícil, le hace
encontrar dentro suya
las fuerzas necesarias para hacerle frente a las pruebas y salvarlas. Y
podemos
analizar en detalle las palabras del Rav, que escribe respecto al
“conocimiento
de la Torá que es asimilado en el principio”. El estudio
al principio de
la vida tiene un valor multiplicado en el fortalecimiento de la persona
y la
adquisición de las fuerzas de vida para toda la
edificación y curso de su vida.
Y la condición para tener éxito en el estudio es el ardor
tras ella, que
comprenda que se trata de una Torá de vida, que ella lo
guía y lo educa
en dirección al plasmado de su papel plenamente.
Y eso es lo que pretende la voz del Shofar (cuerno) hacer
despertar dentro nuestro en Rosh HaShaná (El Principio
del Año). Como escribe
el Sfat Emet “porque lo principal del Shofar es
recordar el día
de la Entrega de la Torá”, ya que de momento que en ese
día se renueva
la creación, también se renueva la fuerza de Israel. Y de
momento que D’s
estipuló con la creación que si los Hijos de Israel
recibirán la Torá
entonces continuaran existiendo, en ese día se renueva la
Entrega de la Torá
“y en base a ello es recordado en el Cielo la Entrega de la Torá,
y se
renueva la elección Divina de los Hijos de Israel” (Sfat Emet.
Rosh HaShaná,
5648-49). Es decir, cuando venimos a coronar a D’s sobre el mundo en Rosh
HaShaná, recordamos la Entrega de la Torá,
para hacerle saber a
todos que el principal coronado de D’s en el mundo es a través
del estudio de
la Torá y el cumplimiento de sus mitzvot, y
todos son participes
en ese coronado.
Y a nuestros queridos hijos que han comenzado un nuevo año
lectivo en
las escuelas y en las ieshivot (centros de estudio de la Torá),
les enseñaremos a ocuparse de la Torá con
entusiasmo y ardor tras ella.
En base a la comprensión que ella, y sólo ella le entrega
la dicha a la persona
en su vida, y serán merecedores de ser parte de los que coronan
a D’s en todos
sus caminos.
Estimado
padre, no te entrometas
Rav
Shlomó Aviner
Estimado
padre, por favor, no te entrometas en lo que se hace en la escuela. Por
favor,
no le dé ordenes al maestro, por favor no lo critiques.
Una gran
regla del raciocinio y la humildad: No todos entienden de todo tema. No
eres un
maestro, y no conoces la complejidad de su papel: Enseñanza,
educación,
disciplina, amor, alentado, y más.
Hay un
chiste. Dijo el presidente de Rusia: Soy el presidente del país
con más vasto
territorio. Dijo el presidente de EE.UU.: Yo soy el presidente del
país más
rico. Dijo el presidente de Israel: Yo soy el presidente del
país que tiene más
presidentes. En efecto, en nuestro país todos saben todo. Hay
ocho millones de
presidentes, ocho millones de Comandantes en Jefe, ocho millones de
médicos,
ocho millones de psicólogos, ocho millones de maestros y por
supuesto ocho
millones de Rabanim (Rabinos). Hay un canto del conjunto de la
Armada: Cada
uno es un general, sólo en Israel…
No es fácil
ser maestro. Más y más abandonan ese puesto. Menos y
menos se dedican a ese
papel. Entonces, por favor, no agregues dificultades. Por el contrario,
exprésales
aprecio.
Cuando era
niño tenía una directora muy estricta, y a pesar de eso
todos la amamos. En los
encuentros de padres, a veces algún padre decía: “Yo
propongo…”. Ella lo
cortaba enseguida, y le decía: “¡Tú no propones
nada! Si no te gusta, puedes
tomar tu niño e irte a otro instituto”.
Debes
saber que el que lo paga, es tu hijo. Él escucha en la casa lo
que tú dices
respecto al maestro, y después se permite a si mismo hablar en
forma semejante.
Si él desprecia al maestro, ¿cómo aprenderá
de él? Es decir, tu comportamiento
se venga en tu hijo. Dicho sea de paso, padres que cada uno es un
general,
también se meten en lo que ocurre después en el
ejército con sus hijos.
Por
ello, corrígete a ti mismo y solo después corrige a los
demás. Se un buen
padre, que también es una tarea difícil, y deja el
trabajo de los maestros para
ellos.
Y si tu
piensas que los maestros no son ángeles, tienes razón,
mucha razón. Entonces,
ve a ser maestro. Y si tu piensas que a veces el niño sufre por
el maestro,
tienes razón. Es tu oportunidad de enseñarle que este
mundo no es un parque de
entretenimientos.
Y para
finalizar, hay un juego de palabras en base al versículo: “Un
hijo descarriado
y rebelde, que no escucha la voz de su padre ni la voz de su madre”
(Dvarim
21:18). Un hijo descarriado y rebelde (el maestro) no escucha la voz de
su
padre ni la voz de su madre (del hijo). [En el versículo
está escrito “rebelde”
utilizando el termino more, que también quiere decir
maestro. N. del
T.].
Meorot
HaShabat
El cometido de esta sección es
familiarizar
a los lectores con las pautas básicas del Shabat. Cada
uno debe aconsejarse
con la autoridad rabínica en su comunidad en cuanto a los
detalles de las numerosas
y a veces complejas halajot del Shabat, y no limitarse
a lo escrito
en esta sección.
Muktze
Tocar algo Muktze
Cuando nuestros sabios decretaron
que distintos objetos sean Muktze, se refirieron a la
prohibición de
moverlos: Prohibieron mover esos objetos. Pero tocar esos objetos de
forma que
no los mueve en absoluto, está permitido[1].
Por lo tanto, una mesa sobre la que
se encuentran velas encendidas, también si la mesa se
convirtió en base de algo
prohibido y es Muktze [véase anteriormente], de todas
formas cuando se
sientan a comer alrededor de la mesa, está permitido tocar la
mesa y poner
sobre ella las manos, a condición que no menee la mesa[2].
También si alguien necesita colocar
algo en Shabat sobre un objeto que es Muktze, no
necesita
cuidarse que sus manos no toquen el Muktze, porque nuestros
sabios prohibieron
solo moverlo, pero no tocarlo [y cuando el tocado es necesario para el Muktze
en sí, los poskim discrepan al respecto, como
será aclarado más
adelante].
Pero si el tocado del Muktze
lo mueve, está prohibido tocarlo. Por ejemplo: Un huevo que fue
puesto en Shabat,
de momento que es Muktze no se lo puede tocar, porque si se lo
toca será
movido[3].
Quitado de algo permitido
Cuando un objeto permitido se
encuentra sobre un objeto que es Muktze, está permitido
quitarlo también
si por ello el Muktze se moverá[4].
Así también está permitido
colocar un objeto permitido sobre un objeto que es Muktze, a
pesar que este
último se moverá[5].
Porque de momento que no mueve el Muktze directamente con sus
manos,
sino que indirectamente, es considerado movido indirecto, que
está permitido
cuando se lo hace por la necesidad de un objeto permitido[6].
[1](Mordeji, Rabeinu Ierujam, HaRav HaMaguid y
Trumat HaDeshen. Fue citado por Beit Iosef, 308 y Ram”a allí,
inciso 3, y
Shuljan Aruj inciso 42).
[2](Allí, Beit Iosef citando Mordeji). Y
también
está permitido tocar el apoyo del oficiante, también
cuando hay velas
encendidas sobre él (allí).
[3](310 inciso 6. Mishná Brurá inciso
22. Kaf HaJaim
inciso 31).
[4](308 inciso 3. Ram”a. Mishná Brurá
inciso 19. Kaf
HaJaim inciso 32. 265, Mishná Brurá inciso 10).
[5](Shuljan Aruj HaRav 308 inciso 14).
[6](Allí).
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