Alumbrar

basado en materiales de Majón Meir

Parashat Vaetjanan     16 de Av 5782     Shabat Najamu     1371 

El rezo de Moshe y el Beit HaMikdash
Rav Oren Travelsi

Nuestro Rav Moshé reza por entrar en Eretz Israel (la Tierra de Israel), pero D’s se niega a recibir sus rezos. Por lo general, D’s anhela el rezo de los tzadikim (justos), pero en este caso le dice a Moshé que cese de rezar, “que te baste ya, no sigas hablándome más de este asunto” (Dvarim 3:26). La razón (según Pnei Ieoshua, Brajot 32B) es porque a pesar del decreto de Mei Meriva [donde fue decretado que Moshé y Aharon no entrarán en la tierra. N. del T.], los rezos de Moshé lograron casi cambiarlo, y si Moshé hubiese continuado rezando D’s hubiese tenido que aceptar su rezo y dejarlo entrar a la tierra. La voluntad de D’s era que Moshé no entre, y por ello le dice no rezar más, y Moshé, el fiel siervo, anula su voluntad frente a la voluntad de su Amo, y cesa de rezar.
Debemos comprender por qué se opuso tajantemente D’s a la entrada de Moshé a la tierra. Explica Megale Amukot (y también Or HaJaim 1:37) que si Moshé hubiese entrado hubiese edificado el Beit HaMikdash (El Templo). La Gmará (Sota 9A) dice que “los enemigos no dominaron las obras de David y Moshé”. Ninguna persona es capaz de destruir las obras de David y Moshé, y por ello el Beit HaMikdash que hubiese sido edificado por Moshé no podría ser destruido. El enojo Divino se descargó sobre maderas y piedras, y no sobre Am Israel (el Pueblo de Israel). Es decir, a través de la destrucción del Beit HaMikdash D’s permite un proceso de arrepentimiento y corregimiento de Am Israel. Pero si no puede ser descargada la ira Divina sobre las maderas y las piedras, ella recaerá sobre Am Israel. Si el Beit HaMikdash será construido por Moshé, no será destruido, pero Am Israel sí. Am Israel no ha llegado aún al nivel adecuado para que Moshé pueda entrar en la tierra y edificar el Beit HaMikdash y ser eterno. Por ello, “el Eterno se encolerizó conmigo a causa de ustedes” (Dvarim 3:26) – para ustedes.
La conclusión es que la edificación del Beit HaMikdash no siempre es lo mejor, porque cuando Am Israel no es apto para ello, puede incluso dañar, y es preferible que no sea construido. Eso también puede ser entendido del termino “vaitaber” (se encolerizó) que utiliza Moshé en su descripción. Nuestros sabios lo interpretan de diferentes formas, una de ellas es que es semejante a la palabra “ibur” (embarazo) de una mujer. Explica Meshej Jojma que para que el embarazo en el vientre materno tenga éxito y haya fruto, debe pasar el tiempo necesario para que madure y sea preparado adecuadamente. Las condiciones para el nacimiento deben madurar, y un embarazo que termina prematuramente es peligroso para la vida de la criatura: “Moshé deseaba entrar y completar la corrección y edificar el Beit HaMikdash, como dijo ‘por favor, déjame pasar y ver…y el Lebanon’ (Dvarim 3:25) que lo insinúa. Y D’s le dio a entender que todavía no ha llegado el momento, como si en medio del embarazo, cuando todavía el feto no está listo para ello, ¿acaso es bueno que sea dado a luz? Así también no ha llegado el momento adecuado para la corrección final, y por lo tanto Moshé debe morir”.
La construcción física del Beit HaMikdash no es lo principal. El Beit HaMikdash es un reflejo del nivel de vida espiritual al que Am Israel debe llegar. A veces por el deseo de alcanzar ya la meta, el espíritu humano se tienta a saltear niveles. La intención es buena, pero es semejante a la criatura que nace antes de haber completado los días de embarazo. El Beit HaMikdash es un nivel de vida elevado al que se debe trepar y elevarse con una tarea espiritual y moral de los individuos y la totalidad genérica. Y luego que las condiciones de vida maduren, será construido en forma eterna.
El Beit HaMikdash va siendo construido todo el tiempo. Nuestros sabios dicen que cada generación en la que no es construido es como si hubiese sido destruido en ella. Explica Sfat Emet (Dvarim 5634) que no es la intención según la interpretación sencilla, ya que hubo generaciones con grandes tzadikim, y D’s no lo permita decir que es como si el Beit HaMikdash haya sido destruido en ellas. Sino que cada generación va construyendo y agregando un nivel interno del Beit HaMikdash, hasta que la realidad sea preparada y sea construido en la práctica, en su forma externa. “El merito de cada generación ayuda y avanza un poco la edificación del Beit HaMikdash. Y cada generación que no ayuda en su construcción, es como si no hubiese sido construido, ya que no son parte de su edificación. Y cada persona, debe saber que todas sus acciones ayudan a la edificación del Beit HaMikdash”.
Moshé apodó el Beit HaMikdash “Lebanon”. Aparte del hecho que el Beit HaMikdash fue construido con arboles del Líbano, nuestros sabios (Ioma 39) dicen que es llamado “Lebanon” porque “blanquea los pecados de Am Israel” [en hebreo, lavan es blanco. N. del T.]. En el Beit HaMikdash se revela un nivel de vida elevado, del que emana la purificación de los pecados. Así también son insinuados en su nombre otros aspectos: “Lebanon” – Lev Nun. El Beit HaMikdash es el corazón de la realidad [en hebreo, lev es corazón. N. del T.]. La hace florecer “porque de momento que el Beit HaMikdash es como el corazón del mundo, emana de él todo tipo de abundancia” (Mahara”l, Gvurot HaShem 5:71). Y también en él se revela el pensamiento más abstracto y elevado, relacionado con los 50 portones del entendimiento [en hebreo, el valor matemático de la letra nun es 50. N. del T.].
Un elevado nivel de vida se revela en el Beit HaMikdash. En él son blanquecidos los pecados. En él se puede concebir lo que se encuentra más allá del entendimiento. Y toda la realidad florece por mérito de él. Para ser merecedores de todos esos niveles se debe elevar la situación de la vida espiritual y moral de la nación a ellos. El Beit HaMikdash es una de esas cosas que justamente el distanciamiento de ellas permite acercarse. Si nos parece que nos encontramos ya cercanos al nivel del Beit HaMikdash, solo lo vamos alejando de nosotros. En base al temor y la comprensión de la distancia se genera el vinculo que nos permite trazar un sendero de avance y acercamiento auténticos a la edificación del Beit HaMikdash, pronto, en nuestros días.

Decisiones
Rav Shlomó Aviner

Pregunta: Me resulta muy difícil tomar decisiones, saber cuál es la voluntad de D’s. ¿Se puede recibir algunas indicaciones?
Respuesta:
1. Estudiar el tema en libros de Emuná (fe), musar (cultivo de las virtudes) y halajá.
2. Si no alcanza con ello para aclarar, conversarlo con un amigo.
3. Si no alcanza, preguntar a un Rav.
4. Hacer una lista todos los argumentos en pro y en contra, ordenarlos en dos columnas, una frente a la otra, y clasificarlos del menos importante al más importante. Comenzar con lo menos importante, y después de uno o dos días continuar con el argumento contiguo en importancia, y así seguir con todos.
5. Sopesar la ventaja de cada posibilidad y la desventaja de ella, es algo que es necesario en toda decisión en la vida, y recibimos herramientas matemáticas de Pascal en su teoría de los juegos, y por supuesto que el resultado no es absoluto sino que estadístico. Se hace una tabla de análisis de riesgo y provecho. Es famoso su análisis en cuanto a si D’s existe o no, y si debemos rendirle culto o no. Hay entonces 4 posibilidades:
1. D’s existe, y tú le rindes culto. Vale 1.
2. D’s no existe, y tú no le rindes culto. Vale 1.
3. D’s no existe, y tú le rindes culto. Sales perdiendo, pero no es tan malo. Vale ½.
4. D’s existe, y tú no le rindes culto. Eso es una catástrofe. Vale 0.
Conclusión: Hay que rendirle culto, sobre todo cuando hay quienes le confieren a la posibilidad 1 nota infinita, y a la posibilidad 4 nota negativa infinita.
Por supuesto, no le rendimos culto a D’s por ese análisis de Pascal, sino que en base a la fe en D’s, vinculación con D’s, amor por D’s.
De todas formas, ese tema de tomado de decisiones es un tema muy amplio, que tiene que ver con la matemática, la estadística, también la filosofía, y es muy necesario cuando se deben tomar resoluciones económicas, y sobre todo militares.
Y nosotros, discípulos de nuestro Rav Moshé, marchamos según la palabra de D’s. 

Meorot HaShabat

El cometido de esta sección es familiarizar a los lectores con las pautas básicas del Shabat. Cada uno debe aconsejarse con la autoridad rabínica en su comunidad en cuanto a los detalles de las numerosas y a veces complejas halajot del Shabat, y no limitarse a lo escrito en esta sección.
Muktze
Muktze
sobre la puerta
Una puerta de casa o un cuarto de la que está colgado algo Muktze, la puerta no se transforma en base de algo prohibido. Y también cuando el Muktze se encuentra colgado sobre la puerta, está permitido abrirla o cerrarla[1].
La razón es que por la importancia de la puerta que sirve a la casa, ella es anulada frente a la casa, y no frente al Muktze colgado de ella[2].

Olvidó Muktze en su bolsillo
Cuando encuentra en Shabat que algún Muktze se encuentra en su bolsillo, si se encuentra allí porque fue olvidado y no lo quitó antes de Shabat, la prenda no se transforma en base de algo prohibido, de momento que no fue dejado allí con intención para que quede todo el Shabat[3]. Pero si puede, debe sacudir el Muktze del bolsillo[4].
Fue dejado con intención
Cuando el Muktze fue dejado en el bolsillo con intención, para que quede allí todo el Shabat [y no pensaba vestir esa prenda en Shabat], el bolsillo se transforma en base de algo prohibido, y también después que el Muktze fue quitado está prohibido meter su mano en ese bolsillo en Shabat[5].
De esa forma [que dejó el Muktze en el bolsillo con intención] a veces toda la prenda se convierte en base de algo prohibido, y está prohibido vestirla en Shabat como será aclarado.
Si se trata de un bolsillo cosido sobre la prenda [como los bolsillos de las camisas], toda la prenda es base del Muktze que se encuentra en el bolsillo, e incluso cuando fue quitado del bolsillo está prohibido mover o vestir la prenda en Shabat[6].
Si se trata de un bolsillo que fue cosido a la prenda sólo en su abertura, y todo el bolsillo está como colgado, la prenda no se convierte en base del Muktze, de momento que no está depositado sobre la prenda misma. Y por ello está permitido mover la prenda. Y de todas formas, si puede, debe sacudir el Muktze del bolsillo, pero no introducirá su mano en el bolsillo a esos efectos, porque el bolsillo mismo es base de algo prohibido [también si está cosido a la prenda en su abertura][7].


[1](Shuljan Aruj, Orej Jaim 277, Beit Iosef y Ram”a, inciso 1).
[2](Allí, Mishná Brurá inciso 7. Kaf HaJaim inciso 11).
Y en Shuljan Aruj HaRav (277, Kuntres Ajaron inciso 3) explicó que a pesar que abriendo la puerta se mueve el Muktze, de todas formas de momento que no toma y mueve el Muktze con la mano, sino que a través del abierto o cerrado de la puerta, es considerado movido en forma lateral, que es permitido para un uso permitido – como entrar o salir de la casa o el cuarto [véase anteriormente]. Y véase allí que citó la opinión del Tur y Hagahot Maiimoniot que abrir la puerta o cerrarla cuando un Muktze se encuentra sobre ella está permitido de momento que está unida a la edificación, y no es considerado movido en absoluto.
Y en Biur Halajá (allí, comienza af al pi) citó al libro Shiurei Korvan que se extrañó ya que en el Ierushalmi está claro que eso se refiere cuando olvidó el Muktze sobre la puerta, pero no cuando lo dejó con intención. Y escribió el Biur Halajá que tal parece que el Talmud Babli discrepa con el Ierushalmi, y terminó diciendo que en la práctica se debe analizar más.

[3](Véase anteriormente).
[4](310, inciso 7, Ram”a y Mishná Brurá inciso 30).
La obligación de sacudir el Muktze depende de la forma en que está cosido el bolsillo. Cuando está cosido a la prenda en todo su contorno, es como si el Muktze se encontrase sobre la prenda misma [como fue aclarado], y por ello si puede sacudirlo tiene la obligación, a pesar que se olvidó el Muktze sobre la prenda y no lo colocó con intención que quede allí todo el Shabat (allí, Mishná Brurá inciso 30. Kaf HaJaim inciso 40. Y véase anteriormente).
Y cuando el bolsillo está cosido solo en su abertura, y el resto está “colgado”, no se considera que el Muktze se encuentra sobre la prenda. El Ram”a allí dice que está permitido en ese caso mover la prenda cuando el Muktze se encuentra en el bolsillo [incluso si fue depositado allí con intención para que quede todo el Shabat]. Y Mishná Brurá (allí, inciso 29) y Kaf HaJaim (inciso 44) escribieron que de todas formas, si puede, sacudirá el Muktze del bolsillo, porque hay quienes opinan que también de esa forma se debe sacudir y quitar el Muktze, incluso si lo olvidó en el bolsillo.

[5](Allí, Mishná Brurá inciso 29).
[6](Allí, inciso 30. Kaf HaJaim inciso 40).
[7](Allí, inciso 29).

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