Alumbrar
basado en materiales de Majón Meir
El
anhelo activo
Rav
Ioram Eliahu
“La fuerza que da vida al alma
de Israel,
es el maravilloso anhelo de la edificación del Beit
HaMikdash (El
Templo)…”, así escribe el Rav Kuk (Shmona Kvatzim 1:648). Todo
el año la
persona debe anhelar y esperar la reconstrucción del Beit
HaMikdash. En
los días de Bien HaMetzarim (desde el ayuno del 17 de
Tamuz hasta el
ayuno del 9 de Av), y su cima es Tisha BeAv (el ayuno del 9 de
Av), eso debe
ser el eje central del día y su esencia. El autor del libro “Netivot
Shalom”
nos enseña (Bamidvar, pág. 191) lo que dicen nuestros
sabios, que “el día en que
fue destruido el Beit HaMikdash nació el Meshiaj
(Redentor)”, y
también cada año en Tisha BeAv después del
mediodía comienza a brillar
el resplandor del Meshiaj. A primera vista, ¿por
qué debe ser recalcado que
ese día nació el Meshiaj? “De momento que en ese
día Am Israel
(el Pueblo de Israel) aviva el anhelo de la gueulá
(Redención) y la reconstrucción
del Beit HaMikdash, a través de ese anhelo hace
despertar la salvación”.
Así explica el Sfat Emet lo que dijeron
nuestros sabios, “cada generación en la que el Beit HaMikdash
no es reconstruido
en sus días es como si fuese destruido en sus días”.
Pregunta el Sfat Emet,
hubo muchas generaciones de tzadikim elevados,
¿cómo puede ser que respecto
a ellos es como si el Beit HaMikdash fue destruido en sus
días? Es que “todos
los días de todas las generaciones se van acumulando los
destellos del culto de
los Hijos de Israel, hasta que sean merecedores de la gueulá”,
porque no
puede ser que la generación en la que será reconstruido
el Beit HaMikdash
sea tan merecedora de por sí sola, “sólo que el
mérito de todas las
generaciones ayuda y trae un poco la reconstrucción”. Es
así que la
reconstrucción del Beit HaMikdash se continúa
todos los días de la galut
(el exilio), cada generación que lo desea, lo anhela, reza por
su
reconstrucción, estudia Torá y cumple mitzvot,
acerca su reconstrucción
en la práctica. Y esa es la intención de lo que citamos,
que cada generación que
no colabora, que no entregó la parte que corresponde en su
construcción, sus
días no son contados en la reconstrucción.
Agrega el Sfat Emet y dice “y toda persona
particular también debe saber que todas sus acciones ayudan a la
edificación
del Beit HaMikdash, de acuerdo con cuánto acepta el yugo
Divino y aporta
a la reconstrucción” (Sfat Emet, Dvarim 634).
El Beit HaMikdash es reconstruido
con las obras y los anhelos de cada generación. Debemos
repetirnos eso a nosotros
mismos y educar nuestros hijos a anhelar y desear la salvación,
que cada acción
incluso pequeña, cada cuidado en el cumplimiento de alguna mitzva,
cada
estudio de la Torá y cada rezo, actúan y acercan
la salvación. Y el
aceptado del yugo Divino y el Reinado de D’s en todos nuestros senderos
de la
vida actuarán y acercarán la salvación que todos
tanto anhelamos. Pronto, en
nuestros días, Amén.
¿Una
redención paulatina?
Rav
Shlomó Aviner
Pregunta:
Estamos pasando una gran crisis,
con
el peor gobierno que hubo desde la Declaración de la
Independencia. Nos dijeron
que la gueulá (Redención) avanza
“paulatinamente, y todo lo que avanza,
va avanzando más” (Ierushalmi, Brajot). ¿Pero ahora vemos
que hay un retroceso?
Respuesta:
Eso fue lo que le ocurrió
a nuestro
Rav Moshé, cuando D’s lo envió a salvar al pueblo, pero
cuando él fue a
hablarle a Paró (el Faraón) la situación
empeoró mucho, y entonces
preguntó: “¿Por qué has hecho mal a este pueblo?
¿Por qué me enviaste? Desde
que vine a Paró para hablar en Tu nombre, él ha
hecho mal a este pueblo,
pero Tú no has salvado a Tu pueblo” (Shmot 5:22-23).
Pero el
Ramba”n pregunta, ¿cómo preguntó algo así
nuestro Rav Moshé? D’s le dijo de
antemano dos veces que el rey de Egipto no los dejará salir
(Shmot 3:19, 4:21) –
¿por qué se enojó? Él contesta que por
supuesto que Moshé sabía porque D’s mismo
le había contado que la gueulá no será de
una vez, sino que en forma
gradual. Pero D’s no le dijo en ese entonces que también
habrá retrocesos en el
camino, y ahora se lo hizo conocer. Eso es lo que dice el Midrash,
que
el redentor surge, y de pronto desaparece, pero finalmente retorna.
“‘Mi amado
es como el venado’ (Shir HaShirim 2:9) – De la misma forma que el
venado se lo
ve y vuelve a esconderse, así también el primer redentor
se lo vio y luego se
escondió de ellos, y finalmente volvió a verse” (Shir
HaShirim Rabah 2:22).
Y eso es
lo que está escrito a continuación “vuelve, amado
mío, sé como el venado o el cervato
sobre las montañas divididas” (Shir HaShirim 2:17). Es decir, el
monte está dividido,
y el venado corre entre ellos, y por ello no se lo ve. Pero en realidad
continúa
corriendo, hasta que finalmente se lo ve del otro lado.
Y
nuestros sabios dicen en el Midrash (Shir HaShirim Rabah) que
esa fue la
intención del Pacto de las Partes que concretó D’s con
Avraham (Bereshit 15).
Y hay
expertos de los animales de Eretz Israel (la Tierra de Israel)
que
explicaron que el venado no corre entre las partes del monte, sino que
pegado
al monte, y de momento que su color es semejante al del monte, como
camuflaje,
no se lo ve porque se mezcla con el monte y parece como si se hubiese
desvanecido, hasta que surge del otro lado.
Y los
grandes talmidei jajamim (eruditos del estudio de la Torá)
de las
corrientes jasídicas preguntaron ¿por qué el
redentor debe revelarse,
esconderse y volverse a revelar? Y contestaron que eso es para que los
delatores por dentro y por fuera no se den cuenta que somos redimidos,
piensen
que todo se trancó y no nos molestarán. Solamente al
final comprenderán que la gueulá
marchó y continuó todo el tiempo, ya sea en forma
evidente o en forma oculta.
Y como
es sabido, la fuente de la expresión “paulatinamente” es del Talmud
Ierushalmi,
al principio del tratado Brajot: “Así es la gueulá
de Israel. Al
principio un poco, y todo lo que avanza, va avanzando más”. Y la
demostración
allí es de los versículos de Meguilat Ester,
cuando nuestra redención
fue surgiendo paulatinamente, cuando D’s preparó un remedio
antes del malestar:
Al principio, Mordejai se encontraba en el portón del rey, y
luego Aman tomó la
vestimenta y el caballo del rey, y después Mordejai
volvió al protón del rey, y
luego Mordejai salió de delante del rey vestido con prendas
reinales, y después
los judíos tuvieron luz y alegría (Ierushalmi,
allí).
Y debemos
preguntar: Es cierto que la luz fue surgiendo paulatinamente,
¡pero en el medio
hubo un decreto de matar y exterminar a todos los judíos, que es
una desgracia
terrible, una oscuridad espantosa! Contesta el autor del libro Jaredim:
“Y
no mencionó la desgracia en medio, es decir, la oscuridad,
porque no detiene el
avance del resplandor”.
También
si en el medio hay oscuridad, el resplandor va aumentando, “es como la
luz de
la aurora, que se va aumentando en resplandor hasta que el día
es perfecto” (Mishlei
4:18).
Meorot
HaShabat
El cometido de esta sección es
familiarizar
a los lectores con las pautas básicas del Shabat. Cada
uno debe aconsejarse
con la autoridad rabínica en su comunidad en cuanto a los
detalles de las numerosas
y a veces complejas halajot del Shabat, y no limitarse
a lo escrito
en esta sección.
Construcción
Atornillado
Un utensilio que está compuesto por
diferentes partes que se atornillan, está prohibido en Shabat
atornillarlas y unirlas[1].
Por lo tanto, el palo de una escoba
que se une a ella atornillándolo, está prohibido en Shabat
desarmarlo o
volverlo a armar. Así también cuando un tornillo de la
patilla de los lentes se
salió de su lugar, está prohibido volverlo a colocar
atornillándolo.
Una tapa de un recipiente que se
coloca atornillándola, como en los bollones de vidrio,
está permitido en Shabat
quitarlas y volver a cerrarlas. Y a pesar de que se las une
atornillándolas,
está permitido, porque no se hace así para que permanezca
atornillada por mucho
tiempo, sino que el objetivo es que el recipiente sea abierto y cerrado
continuamente[2].
Romper
En opinión del Shuljan Aruj está
prohibido edificar y demoler tratándose de utensilios cuando es
una acción de
ese tipo propiamente dicha, como fue aclarado anteriormente.
Por lo tanto, un barril de vino sellado
está prohibido en Shabat romperlo para sacar el vino de
él. Y a pesar de
que la prohibición de demoler es sólo cuando lo hace para
volver a edificar,
mientras que el quebrado del barril no es para volver a cerrarlo, y es
considerado
como un deterioro, de todas formas nuestros sabios lo prohibieron[3].
También en opinión de los que dicen
que no cabe hablar de edificación y demolición
tratándose de utensilios, de
todas formas cuando a través del quebrado hace un utensilio que
puede ser utilizado,
está prohibido según la Torá escrita por
ser Make BePatish [véase
anteriormente] [4].
Esas pautas tienen consecuencias prácticas
cuando se trata de abrir latas de conservas u otro tipo de recipientes
sellados
en Shabat. Y para no llegar a trasgredir ninguna
prohibición, lo mejor
es abrir antes de Shabat las latas de conservas y recipientes
sellados
que le serán necesarios durante el Shabat[5].
Y si no lo hizo, se
debe preguntar a algún erudito en el tema[6].
[1](Shuljan Aruj, Orej Jaim 313. Mishná
Brurá
inciso 45. Y véase Shaar HaTziun allí, inciso 32).
[2](Allí, Mishná Brurá. Kaf
HaJaim inciso 70). Y
véase Shuljan Aruj HaRav (allí, inciso 21) que
escribió: “De momento que no son
para que queden así, sino que para abrirlos y cerrarlos en todo
momento, también
en Shabat, no prohibieron una edificación pasajera y su
demolición sólo cuando
no tiene intención de demolerla en Shabat misma”.
[3](314 inciso 1. Mishná Brurá inciso
7. Biur
Halajá comienza leshovra). Pero incluso en opinión del
Shuljan Aruj está permitido
decirle a un gentil que lo rompa, porque en ese caso se puede fiar en
la
opinión que no cabe hablar de edificación o
demolición tratándose de
utensilios. Y de todas formas, hay poskim que escribieron que incluso
diciéndole a un gentil está prohibido, a no ser que sea
una gran pérdida o le
es muy necesario para cumplir alguna mitzva (allí, inciso 7.
Mishná Brurá inciso
36 37).
[4](Allí, Mishná Brurá inciso
7).
[5]Jazon Ish (51 inciso 11) escribió que
cuando se
abre una lata de conserva se hace un utensilio, y véase
allí varias razones para
prohibirlo. Y véase Tehila LeDavid (314 inciso 12) que lo
prohibió por ser
demolición. Y véase Kaf HaJaim (314 inciso 38).
[6]En nuestros días, los fabricantes innovan
y mejoran
a menudo la forma en que sellan los recipientes y las cajas, las
botellas y los
envases, y por ello se debe preguntar a algún talmid jajam si su
abertura o
rotura está permitida en Shabat.
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