Parashat Itro     24 de Shvat 5781     1295 

Una Torá plena para un pueblo pleno
Rav David Jai HaCohen (reimpresión) 

Respecto al versículo “una vez ha hablado D’s, dos veces lo he oído” (Tehilim 62:12) dijeron nuestros sabios: Los dos primeros mandamientos fueron dichos simultáneamente, pero Am Israel los escuchó como dos mandamientos separados. Y también dijeron “‘cuando el Eterno da orden, aparece una numerosa compañía que anuncia’ (Tehilim 68:12) - cada mandamiento que fue pronunciado por el Eterno, se dividió en setenta lenguas” (Shabat 88B).
Para poder entender la idea que ellos nos desean transmitir, es posible explicar de la siguiente forma: La Torá que nos fue entregada por D’s es la expresión - en este mundo - de Su sabiduría y Su voluntad. A través de ellas, Él se revela en nuestro mundo. También fue escrito en el Zohar (el libro de la Kabalá por excelencia) respecto al versículo “mas vosotros, que os adheristeis al Eterno, vuestro D’s, estáis todos vivos hoy” (Dvarim 4:4): Todo el que está vinculado con la Torá, se encuentra vinculado con D’s, realmente.
En efecto, el contenido profundo de toda la Torá es uno solo, de la misma forma que D’s es uno solo, sin ninguna división. Sólo cuando la Torá nos llega a nosotros, se divide en versículos y lenguas distintas, para que nosotros - criaturas materiales – seamos capaces de recibirla. Toda la grandeza y el éxito en el estudio de la Torá son producto de la comprensión que ella es la palabra de D’s que nos llegó del cielo, y no se la puede estudiar con nimiedades y dividiéndola. Nuestro Rav, el Rav Tzvi Iehudá Kuk zt”l acostumbraba a citar el versículo “pero ahora la palabra del Eterno les será precepto tras precepto, precepto tras precepto, norma sobre norma, norma sobre norma, aquí un poco, allí otro poco, a fin de que vayan y caigan hacia atrás, y sean quebrantados, y sean enredados y cogidos” (Ishaya 28:13), con relación a Mebakrei HaMikrá (analistas faltos de fe del Tanaj y otros escritos, que pretenden ser científicos) que ven la Torá como un conjunto de componentes distintos, y no en forma plena, como se debe ver la palabra de D’s. Es más, nos indicaron nuestros sabios que “quien trasgrede alguna prohibición de la Torá, es como si la trasgrediese en su totalidad” (Julin 4B), porque esa es la esencia de la Torá – algo pleno que nos vincula con el Señor del Mundo. Cuando no se ve la Torá como algo pleno, ella se convierte - D’s no lo permita - en un veneno. Así es la Torá; puede ser una poción de vida, y puede ser un veneno mortal, D’s no lo permita (Kidushin 30B). Y también fue dicho en la Gmará que quien estudia la Torá en forma indebida, ella lo mata.
La Torá debe ser aceptada en su totalidad, y sólo entonces es semejante al alma que expresa sus fuerzas a través de todos los miembros del cuerpo humano: En los ojos viendo, en los oídos escuchando, en el cerebro pensando, en el corazón deseando, etc. Si el alma no es acogida por el cuerpo, ningún miembro tiene fuerzas para llevar a cabo su cometido. Rav Jaim de Voloshin en su libro “Nefesh HaJaim” (Shaar 4, Cap. 11) pregunta: En Midrash Raba al libro Bereshit dijeron nuestros sabios que la idea de Am Israel antecedió a la creación del mundo. ¡Pero también allí fue dicho que la Torá antecedió a todo! Entonces, pregunta Rav Jaim, quién antecedió a quien: ¿La Torá, o Am Israel? Y contesta, que en realidad, ambos son una misma entidad; Am Israel y la Torá no son dos cosas distintas, ya que el alma de Am Israel es Torá. Sólo en su apariencia externa Am Israel puede parecer desvinculado con la Torá y sus mitzvot, pero en realidad, el alma de todo judío se encuentra plena de Torá y de mitzvot. Como dijeron nuestros sabios; “incluso los más vacíos en Am Israel, se encuentran repletos como una granada”. ¡A primera vista, es una contradicción!: Si están vacíos, ¿cómo pueden estar repletos? Es que el aspecto vacío es sólo exterior, pero en el interior ellos son todo Torá.
De acuerdo con ello, de la misma forma que la Torá es una unidad básica, todo Am Israel en su esencia es una misma alma, que se manifiesta en cuerpos distintos. Así está escrito en el libro “Iaarot Dvash” de Rav Natan Aibshitz; hay que rezar por la cura de todos los enfermos de Am Israel, incluso los malvados, porque todo judío es un miembro del gran cuerpo de Am Israel, y si - D’s no lo permita - muere un miembro de ese cuerpo, todo Am Israel quedará inválido. Y así dijeron nuestros sabios (Sota 36): “Todos los miembros de Am Israel son responsables mutuamente”. Toda mitzva que es efectuada por uno de ellos, añade vigor y kdushá (santidad) a toda la nación. Y viceversa; todo pecado daña a todos y cada uno de los miembros de Am Israel.
Todo eso no son sólo hermosos pensamientos abstractos, sino que tienen también su expresión práctica en la halajá: Una persona que ya cumplió una mitzva determinada, puede volverla a cumplir para quien no puede hacerla por sí mismo (por ejemplo, tocar el shofar, o hacer kidush). Una persona puede cumplir una mitzva para miles y decenas de miles de personas de Am Israel, según la responsabilidad mutua anteriormente mencionada (Rosh HaShaná, comentario del Ritv”a, donde dice que todo Am Israel son considerados un mismo cuerpo). Por ello, está claro que no es posible recibir la Torá si Am Israel se encuentra, D’s no lo permita, dividido y desunido. De la misma forma que la Torá de Israel es plena - y sólo en su plenitud resplandece en ella el elevado fulgor - sólo cuando todos los miembros de Am Israel se encuentran unidos se revela en ellos el verdadero resplandor, la Shjina (manifestación de la Presencia Divina) que se encuentra dentro de ellos. Esa es la razón por la que el episodio de la Entrega de la Torá en Har Sinai (Monte de Sinai) sólo podía darse en ese tramo, en el que Am Israel tuvo el mérito de unirse “como una sola persona, con un sólo corazón” (Shmot 19:2, Rashi).
Algo semejante a lo que ocurrió en el pasado en esa generación, vaticinan nuestros sabios en la generación de la gueulá (Redención) en el futuro. Así fue dicho (Baba Batra 8A): “La reunión de los exilios depende del estudio de la Torá”. Es decir, no alcanza con una reunión física superficial sobre la base de ciertos valores, por más bellos que sean: La meta de la reunión de los exilios y la unión, debe ser sobre la base de la Presencia Divina que surca dentro nuestro - cuando nos encontramos en Eretz Israel estudiando la Torá y cumpliéndola - a pesar de que al principio del camino la reunión de exilios será sobre la base de la reconstrucción de la tierra o la nación en su aspecto físico superficial, solamente. 

¿Vacunarse?
Rav Shlomó Aviner

Hemos pasado un año muy duro con la corona: Enfermos y muertos, crisis económica, desconectado de la familia. La vacuna nos proporciona finalmente un resplandor de esperanza. Pero hace despertar también preguntas y dudas. Hay quienes arguyen que no se sabe si ayuda, que fue generada a la apurada y puede producir mutaciones del ADN. Y sobre todo en cuanto al mARN.
Por ello, es obligación buscar en los documentos médicos, y aquí tenemos un resumen al alcance de todos respecto a lo que se sabe y lo que no se sabe:
Antes que nada, ¿qué es mARN y cómo está relacionado con el ADN? El ADN es herencia de los padres biológicos, que encierra en él las “órdenes” de cómo generar las distintas proteínas del cuerpo, como insulina y hemoglobina. El ADN es guardado en el núcleo de las células. Él no genera proteínas de por sí, sino que a través de “órdenes” que envía con el mARN (Ácido Ribo Nucleico mensajero) a los ribosomas que se encuentran en la célula y generan las proteínas.
Ahora, pasamos al virus de la corona. En su superficie exterior se encuentran proteínas que son como una “llave” que le permite penetrar dentro de nuestras células y contaminarlas. Por supuesto que el sistema inmunitario ataca sobre todo esa proteína. Los anticuerpos que son generados durante la infección son orientados a esa “llave” y lo exterminan, lo que permite el saneado y evitado de una infección nueva.
La meta de la vacuna es enseñarle al sistema inmunitario identificar esa proteína y luchar contra ella. Muchas vacunas se basan en la inyección de esa proteína directamente en el cuerpo. El problema es que la producción de esa proteína en laboratorios lleva mucho tiempo y esfuerzo. Por ello, en vez de ello tuvieron la idea de hacer que nuestro propio cuerpo la genere, a través del mARN que dará una “orden” a los ribosomas para generarlo. Identificaron ese mARN muy rápido cuando comenzó la epidemia, y es relativamente fácil generarlo en el laboratorio – lo que también ayudará en caso de que haya alguna mutación significativa del virus.
El mARN penetra dentro de las células del músculo y les imparte la orden de generar esa proteína que es la llave del virus. Hay que recalcar que ese mARN no puede penetrar en el núcleo y entrar en contacto con el ADN. No se puede introducir órdenes dentro del ADN y cambiarlo. Ese mARN es muy frágil y se desintegra muy rápido.
Ese método, de utilización de mARN, no es tan nuevo. La investigación comenzó hace unos 30 años con ratones, y en base a esos experimentos se hicieron vacunas experimentales contra la rabia o la gripe, pero es la primera vez que lo utilizan en gran escala. Por lo general, el desarrollo de una vacuna con experimentos lleva unos 10 años. Entonces, ¿cómo puede ser que esta vez fue tan rápido? En efecto, fue acelerado el proceso de control, pero sin desdeñar ningún parámetro de seguridad. ¿Cómo? Utilizaron datos de análisis anteriores que fueron hechos con virus de la misma familia que la corona, que generaron epidemias en los años 5761 y 5772. Recibieron un presupuesto enorme. En todo el mundo identificaron rápidamente el mARN relevante. Acortaron los procesos administrativos. Encontraron numerosos voluntarios para hacer los experimentos.
¿Acaso la vacuna ayuda? El primer experimento de Pfizer se hizo con decenas de miles de participantes, y fue publicado en la revista “New England Journal of Medicine”. Fue un experimento según las reglas estrictas de un ensayo aleatorizado controlado doble ciego. Aleatorizado – es decir, los participantes son elegidos en forma aleatoria para recibir vacuna o placebo. Doble ciego – es decir, ni el experimentador ni el paciente saben si recibió vacuna o placebo.
De 36621 personas la mitad recibieron vacunas y la mitad recibieron placebo. Después de dos meses de controles, hubo 162 casos de corona en el grupo que recibió el placebo, y 8 en el grupo que recibió vacuna – es decir, un 95% de éxito. En el grupo de los que recibieron placebo 9 personas llegaron a estar enfermas graves, mientras que en el grupo de los que recibieron vacunas sólo 1. Entonces, la vacuna no sólo que ayuda a no enfermarse, sino que también en caso de enfermado evita complicaciones graves.
En cuanto a los efectos secundarios, son dolor en el lugar de la inyección, cansancio, dolor de cabeza y fiebre – que desaparecen luego de 2 o tres días. Son más frecuentes en los jóvenes.
Pero quedaron varias preguntas para contestar:
No sabemos si con el tiempo no surgirán efectos secundarios poco frecuentes, como uno de cada 100.000. Por ello, debemos continuar controlando luego de la vacunación.
Encontraron casos de reacciones alérgicas, sobre todo tratándose de personas con problemas alérgicos.
No hay información en cuanto a niños, mujeres embarazadas y personas con problemas inmunitarios.
No sabemos cuánto tiempo la vacuna es efectiva.
Es cierto que la vacuna es efectiva en cuanto a infección grave, pero no sabemos cuán efectiva es en cuanto al contagio sin síntomas.
No sabemos si reduce la probabilidad de contagio de personas que no fueron vacunadas por personas vacunadas.
Sólo sabemos que protege de aparición de la enfermedad con síntomas.
Entonces, ¿vacunarse o no?
En primer lugar, esa es una decisión personal, en que cada caso debe ser sopesado. Por ejemplo, el peligro de muerte aumenta con la edad. Los mayores son más propensos decenas de veces más que los jóvenes. Por otro lado, hay complicaciones de la enfermedad que dañan a los jóvenes – como dolores de articulaciones, dificultades respiratorias, dolores de cabeza, pérdida del gusto y el olor – durante meses o periodo de tiempo indeterminado.
En segundo lugar es también una decisión social general: La muerte de los mayores, limitación de la vida social y la economía. La vacuna abre una esperanza de solucionar todo eso.
Entonces, hay aspectos positivos y aspectos negativos. La cuestión es qué es más importante. Por supuesto, los Rabanim (Rabinos) no son médicos, pero la halajá dice que se debe decidir según mayoría de médicos, es decir, la corriente central de la medicina.
Según ello, se debe vacunar.
Y también nosotros, personas sencillas, vemos que si sopesamos los problemas de la vacuna frente a los problemas de la corona, es preferible vacunarse.
Y D’s enviará cura plena a todo Am Israel.

Meorot HaShabat

El cometido de esta sección es familiarizar a los lectores con las pautas básicas del Shabat. Cada uno debe aconsejarse con la autoridad rabínica en su comunidad en cuanto a los detalles de las numerosas y a veces complejas halajot del Shabat, y no limitarse a lo escrito en esta sección.
Cazado
Cazado después de haber sido cazado
Un animal que ya fue atrapado y cazado en una jaula o similar antes del Shabat, a veces en Shabat mismo puede darse que sea relevante la prohibición de cazado, como será aclarado.
Cazado en un lugar done puede ser atrapado de una vez
Un animal que fue cazado y atrapado antes del Shabat en un lugar donde se lo puede atrapar de una vez, mientras permanezca en esa situación no cabe hablar al respecto de “cazado” desde el punto de vista de la Torá escrita, y está permitido realizar acciones agregadas de cazado. Pero nuestros sabios prohibieron moverlo con las manos, por la prohibición de mover algo que es muktze[1] [a no ser que lo haga de alguna forma que está permitida[2]].
Hay quienes opinan que a pesar de que según la Torá escrita ese animal es considerado ya cazado, de todas formas nuestros sabios prohibieron realizar acciones de cazado agregadas.
Por ejemplo: Un conejo que está encerrado en un lugar pequeño y angosto, a pesar de que se lo puede atrapar de una vez y es considerado cazado, de todas formas está prohibido colocarle algún recipiente o caja por encima para limitar más su movimiento, porque esa acción es una acción de cazado por encima de lo que ya estaba cazado anteriormente[3].
Cazado en un lugar done no puede ser atrapado de una vez
Un animal que fue cazado en un lugar determinado de forma que no se lo puede atrapar de una vez sin intentarlo varias veces y valerse de artimañas, de momento que según la Torá escrita no es considerado cazado [ya que no puede ser apresado de una vez], si hará alguna acción más gracias a la cual podrá atraparlo de una vez, es como si lo cazase ahora, y según todas las opiniones eso estará prohibido según la Torá escrita en Shabat[4].
Por ejemplo: Una paloma[5] que está encerrada en un cuarto [y no se la puede atrapar de una vez], si ella voló y se sentó sobre un estante de un ropero cuya puerta estaba abierta, está prohibido en Shabat cerrar la puerta del ropero mientras la paloma se encuentre adentro, porque dentro del ropero se la puede atrapar de una vez con facilidad. Y cuando su intención cerrando la puerta es cazar la paloma para utilizarla, comete una trasgresión de la Torá escrita[6] como fue aclarado.