Alumbrar
basado en materiales de Majón Meir
Orden
de prioridades
Rav
Jagai Londin
Al final
de la Parashá Matot nos encontramos con el episodio de
los hijos de Gad,
Reuben y media tribu de Menashe. Cuando nos acercamos a Eretz Israel
(la
Tierra de Israel) hay dos tribus que no están interesadas en
pasar a la margen
occidental del Yarden. La razón oficial es por la fertilidad de
la tierra en la
margen oriental. Por encima del problema del abandono de la lucha por Eretz
Israel, nuestros sabios se dan cuenta que en la formulación
que utilizan
los hijos de Gad y Reuben anteceden sus riquezas a las vidas:
“Edificaremos
aquí rediles de ovinos para nuestro ganado, y ciudades para
nuestros niños”
(Bamidvar 32:16). Nuestro Rav Moshé los corrige, y aclara el
orden de prioridad
correcto: “Construyan ustedes ciudades para sus niños y rediles
para su rebaño
ovino” (Bamidvar 32:24). Pero de todas formas, esa es la actitud con la
que los
hijos de Gad y Reuben comienzan el asentamiento de la tierra, una
actitud materialista
que considera las pertenencias como lo principal. Y de momento que
así es, en
la continuación de la Parashá los Hijos de Israel
son ordenados
consagrar ciudades de refugio. Después que sea conquistada la
tierra, las
ciudades de refugio serán el lugar donde podrán escaparse
las personas que han
matado sin intención, y son divididas según la
relación de tres ciudades en la margen
oriental, y tres ciudades en la margen occidental del Yarden. A primera
vista,
no es proporcional: En la margen occidental se asentarán 9
tribus y media,
mientras que en la margen oriental sólo dos tribus y media. En
la Gmará
explican que en la margen oriental abundarán los asesinos.
Cuando la persona
desarrolla una posición anímica materialista y
egoísta, con el tiempo comenzará
a menospreciar las pertenencias del prójimo, y más tarde
también desestimará
incluso la vida del prójimo, lo que podrá llevarlo a
matar por descuido. Conviene
pensarlo.
Impuestos
Rav
Shlomó Aviner
Pregunta:
¿Según la Torá,
se debe pagar
impuestos?
Respuesta:
Por supuesto. No hay lo
qué
preguntar. Dicho sea de paso, no solo en Israel sino que también
en otros
países hay que pagar. Ellos te dejan vivir en su tierra a
condición de que tú
cumplas con sus leyes, incluso el pago de impuestos.
Pregunta:
Si es una trasgresión no
pagar
impuestos, ¿cómo puede ser que haya quien elude impuestos
y tiene éxito en sus
negocios? ¿Cómo puede recaer la bendición sobre
sus obras?
Respuesta:
Es una profunda y antigua
pregunta,
a la que no tenemos respuesta. ¿Por qué hay un malvado
que le va bien? Así
también hay personas rectas que a duras penas logran procurarse
su sustento. ¿Por
qué hay un tzadik (justo) que le va mal?
Pregunta:
¿Alcanza con pagar
sólo el seguro
social?
Respuesta:
No. Eso es sólo un
seguro. Como un seguro
que se paga por un auto, que recibes su recompensa según la
necesidad, mucha o
poca. Impuestos son un pago al país por todo lo que hace por ti:
Carreteras,
hospitales, policía, escuelas. En forma hipotética, te
podrían exigir un pago
puntual, pero es mejor un pago genérico, que beneficia a los
pobres.
Pregunta:
¿Un talmid jajam (erudito
del
estudio de la Torá) que estudia Torá todo
el día debe pagar
impuestos?
Respuesta:
Por supuesto que no. Y en
efecto, no
paga, porque estudia todo el día y no recibe ningún pago,
y no paga impuesto de
renta. Pero si también tiene algún tipo de trabajo y
recibe un sueldo, entonces
parte del día es una persona que estudia Torá, y
parte del día es una
persona que trabaja. Sobre la parte del día que estudia no
pagará, pero sobre
la parte del día que trabaja debe pagar.
Pregunta:
¿Cómo puede ser
entonces que haya Rabanim
(Rabinos) que dicen que no hay que pagar impuestos?
Respuesta:
No he visto. Pregúntales
directamente. Es cierto que la corriente Neturei Karta piensan
que este
país es del Satán, y por ello opinan que está
prohibido pagar impuestos. Pero
en paralelo ellos opinan que está prohibido recibir algún
provecho del país,
porque se trata del país del Satán. Por ejemplo, sus
mujeres dan a luz en sus
casas, y no en los hospitales. Por supuesto, no estamos de acuerdo con
ellos, y
pensamos que este país es una mitzva. Pero debemos
reconocer que ellos
son sistemáticos y rectos.
Meorot
HaShabat
El cometido de esta sección es
familiarizar
a los lectores con las pautas básicas del Shabat. Cada
uno debe aconsejarse
con la autoridad rabínica en su comunidad en cuanto a los
detalles de las numerosas
y a veces complejas halajot del Shabat, y no limitarse
a lo escrito
en esta sección.
Melaben
Una prenda húmeda
Prendas húmedas, como por ejemplo
alguna prenda que cayó en el agua durante el Shabat,
está prohibido
moverlas, porque se teme que moviéndolas llegue a escurrirlas[1].
Por ejemplo: Un mantel sobre el que
se volcó mucha agua. O también un gorro que el viento le
quitó de la cabeza y
cayó en un charco, también si su dueño teme que si
quedará en el agua hasta el término
del Shabat se estropeará, está prohibido sacarlo
del agua, porque se
teme que llegue a escurrirlo[2].
Cuando no se teme que escurra
Hay formas de humedecer una prenda
en Shabat que no se teme que llegue a escurrirla. De la misma
forma que
está permitido humedecerla, así también si se
humedeció está permitido moverla
cuando está húmeda[3]:
1. Una prenda que no le importa que
quede húmeda, como por ejemplo un trapo de piso, no se teme que
llegue a
escurrirlo.
2. Si el líquido que fue absorbido
por la prenda no es agua sino que otro tipo de líquido, y si
escurrirá la
prenda quedará la mancha del líquido en la prenda, no se
teme que llegue a escurrirla.
3. Cuando se trata de poca agua que
fue absorbida, no se teme que llegue a escurrir la prenda.
A veces la prenda absorbió tanta
agua que incluso sólo tocándola se la escurre. Se debe
prestar atención a ello,
cuando desea mover una prenda húmeda.
[1](Shuljan Aruj, Orej Jaim 301, inciso 46. Ram”a
citando al Mordejai. Mishná Brurá inciso 171).
Y en cuanto a prendas
lavadas que todavía están húmedas en Shabat,
véase Mishná Brurá (308, inciso
63) que si a la entrada del Shabat estaban tan húmedas que si
las toca luego
podrá humedecer algo con su mano, también si se secaron
son Muktze, porque de
momento que era Muktze a la entrada del Shabat, lo es para todo el
Shabat.
[2]En Beit Iosef (allí) y Maguen Avraham
(allí,
inciso 58) escribieron que se debe permitir mover una prenda
húmeda si la
levantan diez personas, porque de momento que son tantos unos les
recordarán a
los otros que está prohibido escurrir en Shabat. Fue citado por
Kaf HaJaim
(allí, inciso 268). Y véase Elia Rabah (allí,
inciso 80) que si son dos
personas es considerado que son “muchos”, y se recuerdan el uno al otro
que está
prohibido. Y en Tehila LeDavid (inciso 44) escribió que se
necesitan justamente
diez personas. Y así también Tosefet Shabat (inciso 86).
Y véase Kaf HaJaim (allí)
que el Ieshuot Iaacov prohíbe incluso si son muchos.
Pero citando al Ben Ish
Jai dijo que se inclinó según la opinión de los
que lo permiten, y por ello
escribió que el que se le cayó una prenda en la Mikve y
se mojó, y teme que quede
en el agua, vendrán diez personas y la sacaran y la depositaran
en otro lado.
[3](Shuljan Aruj, Orej Jaim 301, inciso 46, Ram”a.
Mishná Brurá inciso 171 172. Shuljan Aruj HaRav
allí, inciso 59. Ben Ish Jai,
primer año, Vaieji inciso 6. Kaf HaJaim inciso 269 y 270).
Es posible leer
la publicación de esta semana y las anteriores en www.alumbrar.org. Para recibirla
directamente a
su casilla
de correo electrónico, escríbanos a suscribame@alumbrar.org