Alumbrar

basado en materiales de Majón Meir

Parashat Vaishlaj     16 de Kislev 5779     1195 

"De mano de mi hermano, de mano de Esav"
Rav Itiel Ariel
(reimpresión) 

El Netzi”v (Rav Tzvi Iehudá Naftalí Berlín) en su comentario "Hamek Davar" (Bereshit 33:1) nos hace notar el cambio en la forma en que se dispuso nuestro patriarca Iaacov cuando se encontró con Esav, en relación a la forma en que se preparó a sí mismo y a su gente para ese encuentro decisivo.
Al principio Iaacov se preparó para obsequiarlo, rezó a D's y se dispuso a luchar, y por ello dividió su gente en dos campamentos - "si viene Esav al primer campamento y lo hiere, el campamento que queda escapará" (Bereshit 32:9). Los comentaristas señalan la razón lógica de esa medida, que tenía por objetivo aumentar la posibilidad de escapar y sobrevivir de parte de su gente, o quizás permitirles defenderse de forma más efectiva. Nuestros sabios (Bereshit Rabah, 76) alabaron esa acción, y aprendieron de ella para todas las generaciones: "Nos enseña la Torá la forma correcta de conducirse, que no deposite la persona todas sus riquezas en un sólo lado", y como hizo Ovadia, que escondió a los profetas para salvarlos "cincuenta en una cueva y cincuenta en otra" (Melajim Alef 18:13).
Pero debemos comprender, ¿por qué cambió nuestro patriarca Iaacov su táctica a último momento, y presentó toda su familia junta frente a Esav, en un sólo grupo?
El Netzi”v dice que la razón de ese cambio fue el encuentro nocturno entre Iaacov y el ángel, cuando al romper el alba le fue aclarado cuál es el tipo de conflicto que él sostiene con Esav - y debemos precisar más su idea. Esa lucha acentuó la secreta aprensión de Iaacov, que lo acompaño durante toda su preparación para el encuentro con Esav: Él teme que Esav no lo atacará, sino que por el contrario, lo abrazará. Luego de la lucha con el Ángel de Esav, Iaacov comprendió el terrible peligro cultural que se esconde en esa unión, que no es menor que el peligro de existencia que implica un combate contra él - y quizás mayor aún.
Desde un principio Iaacov expresa un recelo doble, cuando dice "líbrame, Te ruego, de mano de mi hermano, de mano de Esav" (Bereshit 32:12), porque quizás se comporte con malicia, o quizás se comporte con hermandad. El autor del comentario "Shem MiShmuel" dice que en realidad no hay ninguna discusión si Esav se abalanzó sobre el cuello de Iaacov para besarlo sinceramente o para morderlo (Rashi 33:4): También quien explica que intentó morderlo, consiente en que lo beso, pero ese mismo beso es como una mordedura para Iaacov, porque puede cobrar más víctimas de Am Israel a lo largo de las generaciones que una mordedura auténtica.
Mientras el peligro se limitó al plano existencial, Iaacov pensaba - y con razón - que es preferible dividir a su gente, y aumentar la probabilidad de subsistencia de Am Israel (el Pueblo de Israel). Pero cuando le fue aclarada la verdadera dimensión del peligro espiritual en toda su envergadura, comprendió que es preferible unir las fuerzas, para repeler todos juntos el peligro de asimilación y desmenuzamiento.
Y en efecto, el temor de Iaacov en cuanto a la hermandad de Esav resultó ser justificado, y cuando Esav le rogó que se adhiera a él - "emprendamos la marcha y vayamos, y yo iré junto contigo" (Bereshit 33:12), a primera vista Iaacov se "escabulle" diplomáticamente y arguye que los tiernos niños que necesitan del cuidado y el ganado no pueden soportar un paso tan rápido. Pero Rav Bejaiei (allí) en su comentario aclara que Iaacov insinúa en forma clara la verdadera razón de su oposición a esa unión con Esav: Mientras los niños sean pequeños y aún no cumplen la totalidad de las mitzvot, no estarán maduros para hacerle frente a la cultura de Esav. Es necesario acompañarlos, yendo lentamente, por un largo camino, hasta que adquieran el vigor espiritual suficiente para llegar a ese encuentro con orgullo. Ya que si la exposición a esa cultura no se hará en forma controlada, Am Israel - que son apodados "ganado santo" - puede perder su capacidad de subsistencia espiritual, y dejarse llevar por corrientes ajenas.
Les es adecuado a los hijos de Iaacov ir por un camino lento y esconderse al principio de él en el Beit HaMidrash (centro de estudio de la Torá) de Shem y Ever, para "cargar" sus baterías internas, "hasta que llegue a mi señor, en Seir" (Bereshit 33:14). 

Yo soy adicta al Internet
Rav Shlomó Aviner

Pregunta: Yo soy adicta al Internet, incluyendo sitios pornográficos. Me siento tan sucia, cada vez decido no volver a ello, pero no lo logro. Es más fuerte que yo. Desperdicio horas a cuestas de cosas más importantes, como la familia o las amigas. Siento un tremendo impulso de mirar, y si no lo colmo estoy inquieta, como con una tormenta interior, enojo y miedo. ¿Qué puedo hacer?
Respuesta: Antes que nada, lamentablemente no estás sola con ese problema. Hay quienes piensan que sólo le pasa a hombres, pero en realidad la misma cantidad de mujeres están presas en el Internet, pero en un tipo distinto de inmundicias. Por supuesto, eso no consuela, sólo lo hace más terrible.
Lo primero es reconocer que se trata de un problema terrible, que no se debe disminuir su severidad, y que es obligación solucionar, y es posible solucionar. Bienaventurada eres que ya te encuentras en ese lugar.
Lo segundo, es que tratándose de una lucha tan dura, necesitas aliados que te ayuden. Es decir, debes compartirlo con tus amigas o familiares, personas en las que tú confías para que te ayuden.
Lo tercero, es que realmente se necesita ayuda profesional porque se trata de una adicción, es decir, una consejera psicóloga, grupo de ayuda y similar. En toda ciudad de Israel hay grupos de autoayuda, o grupos de apoyo, se los puede encontrar buscando en el Internet. Y también puedes dirigirte a la línea de ayuda “Nafshej”, una línea anónima de mujeres con problemas similares al tuyo, domingo y lunes de 19:00 a 22:00 en el teléfono 02-674-6650.
Lo cuarto, es que a veces la adicción al Internet es un escape de problemas dolorosos que tienes en la vida, personales, familiares, profesionales. Por ello, en paralelo, hay que solucionarlos. Y a veces ese escape surge por la falta de autoestima, por ello toma una libreta, anota todo el tiempo toda buena virtud y toda buena acción, y léelo, para que veas tú misma cuán valiosa eres.
Lo último, debes saber que es cierto que es difícil liberarse de ello, pero es posible. Y después sentirás una gran dicha, un gran resplandor, una gran pureza.
Fortalécete y se valiente.

Meorot HaShabat

El cometido de esta sección es familiarizar a los lectores con las pautas básicas del Shabat. Cada uno debe aconsejarse con la autoridad rabínica en su comunidad en cuanto a los detalles de las numerosas y a veces complejas halajot del Shabat, y no limitarse a lo escrito en esta sección.
Bishul
Está permitido en Shabat colocar trozos de carne cocinados sobre una olla que se encuentra sobre el fuego para calentarlos, porque la carne es algo seco, y tratándose de algo seco la regla es que “no hay cocinado luego del cocinado”, como fue aclarado anteriormente.
Incluso si dentro de las porciones de carne hay grasa que se fundirá en el calentado, la carne es considerada seca, porque de momento que cuando deposita la carne para ser calentada la grasa todavía no se fundió, es considerada seca
[1].
Pero está prohibido calentar el jugo coagulado sobre una olla que se encuentra sobre el fuego en donde el jugo puede llegar a la temperatura que la mano se aparta, porque el jugo es considerado líquido, y cuando algo liquido se enfrió se considera que puede volver a ser cocinado, como fue aclarado[2].
El azúcar que ha sido cocinada en su proceso de fabricación, de momento que es algo seco, “no hay cocinado luego del cocinado”, y está permitido ponerla dentro de agua caliente a una temperatura que la mano se aparta, incluso cuando se encuentran en Kli Rishón[3] [que no está sobre el fuego, véase acotación], y a pesar que el azúcar se disuelve, es considerado seco[4]. Y hay quienes discrepan[5]. Y escribió el Mishná Brurá que es bueno cuidarse de ello tratándose de Kli Rishón, pero si es Kli Sheni no se debe ser estricto[6].


[1](Shuljan Aruj, Orej Jaim 318 inciso 16, Mishná Brurá inciso 100). Y se está hablando que la porción de carne fue sacada de la sopa o el jugo donde fue cocinada (allí, Mishná Brurá inciso 32).
Cuando hay mucha grasa en la carne, y cuando se funda será notoria de por sí misma, en opinión del Shuljan Aruj también en ese caso está permitido poner la carne sobre una olla para calentarla, y no está prohibido por hacer nacer algo nuevo (allí, Mishná Brurá inciso 102). Y en opinión del Ram”a hay que ser más estricto, porque la grasa se transforma de coagulada a líquida. Y si hay mucha necesidad, no se debe ser estricto e incluso en un principio está permitido colocar la carne sobre una olla para calentarla (allí, Ram”a. Mishná Brurá inciso 105).

[2](Allí, Mishná Brurá inciso 104).
Hay distintos grados de viscosidad de jugos, y en los poskim no fue aclarado qué es considerado líquido y qué es considerado sólido, y hay que preguntar a una autoridad rabínica en cada caso particular.

[3]Kli Rishón es el recipiente donde el agua fue hervida, y mientras se encuentra por encima de la temperatura que la mano se aparta, es considerado que el agua es capaz de cocinar [incluso si el recipiente fue bajado del fuego]. Y cuando el agua fue vertida a otro recipiente, es Kli Sheni.
[4](Allí, Mishná Brurá inciso 71).
[5](Majzik Braja citando a Zera Emet inciso 39. Fue citado en Shaarei Tshuvá y Mishná Brurá allí, Kaf HaJaim inciso 118). Y según esa opinión el que prepara café o similar no debe verter el agua del Kli Rishón sobre el azúcar [porque el vertido de Kli Rishón es capaz de cocinar, como será aclarado más adelante], sino que primero verterá el agua en el vaso, y luego pondrá al azúcar en el agua del vaso, que es Kli Sheni.
Y véase en Zera Emet (allí) que escribió dos razones para ser más estrictos. 1. Que el azúcar en el proceso de fabricación no es cocinado sino que horneado [así se acostumbraba en su época], y por lo tanto es como cocción luego de horneado, que según la opinión de muchos poskim está prohibido. 2. De momento que la intención en la fabricación del azúcar no es que sea comida de por sí, sino que después de haber sido disuelta en el agua, entonces los granos de azúcar son considerados como algo cuya cocción no ha terminado, y está totalmente prohibido cocinarlos.

[6](Allí, Mishná Brurá inciso 71, Shaar HaTziun inciso 96).

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