Alumbrar

basado en materiales de Majón Meir

Parashat Tzav     8 de Nisan 5778     Shabat HaGadol     1162

Fuimos redimidos y diferenciados
En la actualidad

Cada festividad nos trae su corrección y resplandor singular, un resplandor que es un poco como el primer alumbramiento que le fue entregado a Am Israel (el Pueblo de Israel). A través del cumplimiento de las mitzvot que fuimos ordenados, “en recuerdo de la Salida de Egipto”, nos alumbra un resplandor semejante a cuando salimos con la mano en alto de Egipto.
El tema de la prohibición del jametz (fermento) y el comido de la Matza (pan ácimo), nos recuerda y nos enseña que hasta la Salida de Egipto Am Israel se encontraba mezclado con el resto de las naciones, “un pueblo de adentro de un pueblo”, y en la Salida de Egipto fuimos redimidos y diferenciados. ¿De qué manera? El jametz, el pan común que comemos todos los días del año, es afín con la naturaleza del hombre, es fácil de digestión y es sabroso. Nuestros sabios asemejan el jametz al Ietzer HaRrá (mal instinto) de la persona.
Pero hay un momento especial, que es la festividad de Pesaj, en la que Am Israel fue ordenado prescindir totalmente del jametz, cuando está prohibido que se encuentre o se lo vea entre nosotros. A través del comido de la Matza disminuimos la fuerza del Ietzer HaRrá y la tendencia material, y fortalecemos la vinculación con lo espiritual, con nuestro padre en el Cielo. La Matza es el “pan de la fe”. Por ello nos hacemos merecedores de la abundancia y el resplandor de Pesaj, el “momento de nuestra libertad”, en el que fuimos redimidos y diferenciados (véase Ramja”l, Derej Hashem 4:88).

En la actualidad, en cada generación la persona debe verse a sí misma como si él saliese ahora de la esclavitud de Egipto, y al respecto ordenó D’s en la Torá “recordarás que fuiste esclavo, es decir como si tú mismo fuiste esclavo y has salido a la libertad y fuiste liberado” (Ramba”m, Hiljot Jametz UMatza 7:6). En nuestra generación, la generación del renacimiento nacional y la reunión de los exilios, vemos en forma palpable la salida de la galut (el exilio) a la gueulá (redención), de la oscuridad a la luz, y nos es relativamente fácil vernos a nosotros mismos como si ahora hayamos salido de la galut a la gueulá. Pero como hemos dicho, no sólo fuimos redimidos sino que también fuimos diferenciados con la Salida de Egipto de todos los pueblos. Reconocimos nuestra identidad que nos hace singulares y nos diferencia de los egipcios y de los demás pueblos del mundo, porque D’s nos eligió de entre todos los pueblos y nos ama como bendecimos día a día, “que elige a Su pueblo Israel con amor”. Sobre todo en la Noche del Seder debemos recordar no sólo la gueulá sino que también la diferenciación entre nosotros y las demás naciones, y en base a ello seremos merecedores de clamar frente al que dijo y el mundo fue hecho un canto nuevo, con gran alegría: “Cuando Am Israel salió de Egipto, la Casa de Iaacov de un pueblo extranjero…” (rezo de Halel).

Con bendiciones de Jag Kasher VeSameaj
(fiesta alegre y kasher)
con anhelo de la gueulá plena

Dov Bigún

Feminismo religioso
Rav Shlomó Aviner

Pregunta: En honor del Día Internacional de la Mujer cabe preguntar, ¿es bueno el fenómeno nuevo del feminismo religioso?
Respuesta: Antes que nada, no es algo nuevo, ya surgió en EE.UU. hace decenas de años, y el Gaón (genio del estudio de la Torá), el Rav Iosef Dov HaLevi Solovietchik escribió mucho al respecto, y sus palabras son relevantes también para nosotros.
Pero en ese tema, como en otros, hay que cuidarse del negado de lo mediano: O todo bueno, o todo malo – pensamiento en blanco y negro. Depende de qué hablamos:
Ayuda a las mujeres que esperan ser divorciadas por sus maridos – excelente.
Estudio de la Torá en Ulpena, Mijlala, Midrasha (distintos marcos de estudio de la Torá para muchachas) – por supuesto que es bueno, siempre que sea según un estilo y un programa adaptado a la mujer, y no como un intento de copiar lo que hacen los hombres.
Rezo – es cierto que la mujer no tiene obligación de rezar en minian (diez hombres mayores), pero hoy en día en todo Beit Kneset (Sinagoga) hay Ezrat Nashim (sección para las mujeres). Depende de lo que a ella le es bueno.
Lectura de la Meguila por una mujer – no es relevante.
Argumentadora frente tribunal rabínico, para ayudar a desgraciadas – muy bueno.
Consejera de halajá – siempre hubo, pero sin trompetas.
Combate contra la prostitución, trata de blancas, filmes pornográficos – una gran mitzva.

Agregado: Direcciones que impartió el Gri”d (el Gaón, el Rav Iosef Dov HaLevi Solovietchik):
Mujer y Talit
Cuentan sobre el Gri”d que una mujer le preguntó si puede vestir Talit en el rezo. Le contestó: De momento que es un gran cambio respecto a la costumbre tradicional, hay que avanzar en forma paulatina. Le propuso vestir una prenda de cuatro esquinas sin tzitzit durante tres meses, y volver a hablarle. Luego de tres meses ella volvió, y dijo que fue la experiencia más emocionante en su vida. Le contestó el Gri”d: Durante tres meses tú vestiste una prenda que no tiene ningún valor desde el punto de vista religioso o de la halajá, eso demuestra que tu emoción llega de otro lado, que no tiene nada que ver con la mitzva. Y no consintió con que ella vista Talit (HaRav Arie Primer y el Rav Dov Primer, Tradition 32:2).

Ezrat Nashim
Una persona de Europa expresó su extrañeza frente al Gri”d respecto a cierto Beit Kneset en Viena, en el que antes de la guerra los jaredim (ultra ortodoxos) más puntillosos nunca rezaron en él. Le preguntó al Gri”d: Ya que en ese Beit Kneset había Ezrat Nashim por arriba, y eran ortodoxos y no reformistas, entonces ¿por qué no rezaron allí?
Y le contestó el Gri”d enseguida: ¿Tú no entiendes? En un Beit Kneset ortodoxo en serio hacen la Ezrat Nashim se construye arriba sólo por atrás, para que los hombres que se sientan abajo no puedan mirar hacia arriba y ver a las mujeres. Pero en ese Beit Kneset la Ezrat Nashim fue construida por arriba no sólo atrás sino que también por ambos lados, y los puntillosos lo consideraron un intento de modernización, ya que los hombres abajo pueden mirar arriba y ver a las mujeres que se sientan a ambos lados, y por eso se negaron a rezar allí (Divrei HaRav 140).

Universidad separada
Es sabido que en EE.UU. cuando en Ieshive University propusieron que en un mismo campus estudien muchachos y muchachas, el Gri”d y muchos otros Rabanim que enseñaban amenazaron con presentar su renuncia (Dr. Tova Lictenshtein, la hija del Gri”d y la esposa del Gaón, el Rav Avraham Lictenshtein. Fue citado en una entrevista y en el libro An American Dreamer, pág. 170 acotación 42. Y en Mentor of Generations, Reflections on Rabbi Joseph B. Soloveitchik, pág. 8. También el Rav Aharon Rakefet – que enseñaba en Gross-Kolel – menciona eso en sus clases. Y también en otros lugares).
Minian de mujeres
Es sabido que el Gri”d expresó su opinión frente a varios Rabanim de EE.UU. y de Canadá que no es correcto que en el Beit Kneset hayan grupos de rezo de mujeres en Shabat, o para leer la Torá, o la Meguila, o Hakafot (Nefesh HaRav, pág. 145).
Y una vez entró uno de los Rabanim jóvenes modernos a hablar con el Gri”d, y le dijo que está por empezar un grupo de rezo especial para mujeres en su Beit Kneset, y el Gri”d no reaccionó. Cuando salió, le preguntó el Rav Menajen Haelzar [que estuvo presente, y conocía la opinión del Gri”d al respecto] por qué no le dijo que no lo haga. Le contestó el Gri”d que le pareció que ese Rav no llegó a preguntarle su opinión, y no estaba interesado en escucharlo, sólo le vino a contar de su decisión, y por eso no le dijo nada (MiPninei HaRav, pág. 67-68. Y véase lo que dijo el Gaón, el Rav Tzvi Shijter que eso trasgrede doce prohibiciones. BeIkvei HaTzon, pág. 21-37).

Lectura de una mujer de la Meguila
Uno de los Rabanim jóvenes modernos que recibieron su autorización de Ieshive University quiso organizar un grupo de lectura de la Meguila para mujeres, cuando una de ellas lee la Meguila para las otras, y quería recibir el consentimiento del Gri”d. Pero temía que este se oponga. Por ello, intentó hacerlo con astucia, y envió otro Rav que le pregunte. Le contestó el Gri”d que no se debe hacer así, que según lo que es explicado en el Midrash HaNeelam de Rut [citado por el Maguen Avraham 689 inciso 6] una mujer no debe leer incluso para sí misma, sólo escuchará la lectura de un hombre. Y cuando ese Rav le contó lo que dijo el Gri”d al primer Rav moderno, este decidió a pesar de ello organizar ese grupo, a pesar que el Gri”d se opuso, de momento que él mismo no le preguntó, y el Gri”d no se lo prohibió en forma personal… (MiPninei HaRav, pág. 68).                                                                    

Meorot HaShabat

El cometido de esta sección es familiarizar a los lectores con las pautas básicas del Shabat. Cada uno debe aconsejarse con la autoridad rabínica en su comunidad en cuanto a los detalles de las numerosas y a veces complejas halajot del Shabat, y no limitarse a lo escrito en esta sección.
La salida del Shabat
Nuestros sabios prohibieron hacer toda melaja [trabajo prohibido en Shabat] a la salida del Shabat antes que acompañe al rey en su salida, es decir, antes que haga Habdala[1].
Incluso si ya pasó el momento en que Shabat termina, y ya agregó sobre ello, tiene prohibido hacer melaja hasta que haga Habdala, porque mientras no lo hizo, todavía recae un poco sobre él la kdushá [santidad] del Shabat[2].
También toda melaja u ocupación de sus asuntos diarios que están prohibidos en Shabat según nuestros sabios están incluidos en esa prohibición[3], y también mover muktze está prohibido antes de hacer Habdala[4].
El que hace melaja a la salida del Shabat sin antes hacer Habdala no ve ninguna bendición de su acción[5].
Si rezó Arvit y mencionó la Habdala en su rezo, es decir, dijo “ata jonantanu”, tiene permitido hacer melaja, a pesar que todavía no hizo Habdala sobre la copa[6].
El que se ve necesitado de hacer melaja antes de hacer Habdala en el rezo, cuando ya pasó el momento en que termina Shabat
, no tiene que decir toda la formulación de la Habdala para que tenga permitido hacer melaja, sino que alcanza con que diga “baruj hamabdil bein kodesh lejol” sin mencionar el nombre de D’s ni Su reinado[7]. Con ello, en relación a hacer melaja, ya es notorio que acompaña al Rey a su salida[8].
También el que se olvidó de decir “ata jonantanu” en su rezo y quiere hacer melaja luego de haber rezado, antes de recitar la Habdala sobre la copa, debe decir “baruj hamabdil bein kodesh lejol [9].


[1](Shabat 150B, Tur, Shuljan Aruj 299 inciso 10, Shuljan Aruj HaRav allí, inciso 15).
[2](Allí, Shuljan Aruj, Shuljan Aruj HaRav, Mishná Brurá inciso 33).
[3](Allí, Mishná Brurá inciso 32, Kaf HaJaim inciso 50. Y así también Shuljan Aruj HaRav inciso 16). Y véase allí entre paréntesis que prohibiciones de nuestros sabios que dependen de lo que se dice [como por ejemplo decirle a su compañero que ya hizo Habdala que haga alguna melaja para él] están permitidas, y hay quien permite prohibiciones de nuestros sabios que no son similares a ninguna melaja, y sólo son prohibidas porque así se acostumbra a hacer en días corrientes (véase allí, y al final de 263 en Ram”a).
[4](Pri Megadim allí, Eshel Avraham inciso 17).
[5](Psajim 50B, Tur al final 299, citado por Kaf HaJaim allí inciso 66).
[6](Allí, inciso 10).
Y en Kaf HaJaim (allí, inciso 59) citó al Jasa”l que hay quienes opinan que también si hizo Habdala en el rezo, debe decir “baruj hamabdil bein kodesh lejol” antes de hacer melaja, y el que puede es bueno que se cuide de no hacer ninguna melaja hasta después de haber recitado la Habdala sobre la copa.

[7]En el Shuljan Aruj allí escribió que debe decir “hamabdil bein hakodesh ubein hajol”, y no mencionó “baruj hamabdil”, y así también el Ram”a allí. Pero Mishná Brurá (inciso 34) citó al Lebush que debe decir “baruj hamabdil bein hakodesh ubein hajol”, y así también el Shuljan Aruj HaRav (allí, inciso 16), y fue citado en Kaf HaJaim (allí, inciso 55).
[8](Shabat 150B, Rashi comienza hamabdil, Shuljan Aruj allí, Mishná Brurá inciso 34 35).
Y las mujeres que no rezan Arvit, hay que recordarles que digan “baruj hamabdil…” antes que hagan melaja (allí, inciso 10, Ram”a citando al Kol Bo).
Y en Mishná Brurá (allí, inciso 40) escribió que el que es más estricto consigo mismo y puede, hará como escribió Darkei Moshé citando a Or Zarua y así también en el Zohar, que no encenderá ninguna vela o luz hasta después de haber dicho la Kdushá después de Shmona Ezre. Pero el servidor del Beit Kneset (Sinagoga) tiene permitido encender la luz luego de haber dicho “ata jonantanu” en el rezo, o luego de haber dicho “baruj hamabdil bein kodesh lejol”, para que el público no permanezca en la oscuridad, por su honor.
Y el Ben Ish Jai (segundo año, Vaietze inciso 24) escribió respecto al sirviente que quiere encender la luz luego de haber dicho “ata jonantanu” en el rezo, que hay quienes opinan que diga “baruj hamabdil…”, y concluyó que así se debe hacer.

[9](véase Shuljan Aruj allí).

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