Alumbrar
basado en materiales de Majón Meir
Rav Ioram
Eliahu
La kdushá de Am
Israel se expresa en forma singular en la kdushá del
Shabat.
“El Shabat” – nos enseña el Rav Tzvi Iehudá Kuk –
“es la esencia del
judaísmo, pertenece a nuestro interior, a nuestra esencia, a
nuestra potencia
de vida, pertenece solamente a la realidad de Am Israel y no de
los
gentiles, ‘y no lo entregó el Eterno, nuestro Señor, a
los gentiles… sino que a
Israel Tu pueblo lo has entregado con amor, a la descendencia de Iaacov
que has
elegido’” (Sijot HaRav Tzvi Iehudá, Shmot pág. 157). Y
por ello un gentil que
cuida el Shabat se merece la muerte, explica el Mahara”l
porque
el Shabat es un poco como el Mundo Venidero. Todos los miembros
de Am
Israel tienen una parte en el Mundo Venidero, tienen cierta
vinculación con
la eternidad. Lo que no es así tratándose de gentiles. El
Shabat
pertenece a la eternidad y el Pueblo Eterno, y no a los gentiles cuya
existencia es pasajera. Y de momento que la realidad de las vidas de
los
gentiles es este mundo, ellos tienen que ocuparse del asentamiento y
desarrollo
de él.
El Shabat es
especial para Israel, y tiene otra diferencia más de la kdushá
de las
festividades: Él es fijo, “es una kdushá del
tiempo Divina, no surge a
través nuestro, es el Shabat de D’s, y ‘por ello D’s
bendijo al Shabat
y lo santifico’”. En base a la kdushá singular solamente
de Israel,
ellos tienen la capacidad de santificar las festividades “y ellos
revelan de
esa forma el valor santo auténtico. El valor de la existencia
auténtica de los
órdenes de vida de la persona en su mundo” (el Rav Tzvi
Iehudá Kuk). De forma
que la kdushá de Rosh Jodesh (principio del mes)
y las otras
festividades es una kdushá nuestra, una kdushá
que se revela a
través nuestro y en base a nuestro contenido, a través
del Beit Din (Corte
de Justicia, que determina el principio del mes). Nuestra kdushá
genérica de Israel se revela en el hecho que nosotros
santificamos las
festividades.
Nuestro Rav, el Rav Tzvi
Iehudá Kuk, se alegraba especialmente cuando se encontraban el Shabat
y Rosh
Jodesh, “esta vez fuimos merecedores de algo especial que no
siempre ocurre
en todo Rosh Jodesh. Dos niveles de kdushá se
encuentran, se
conjugan y nos alumbran, D’s nos hizo una conjugación de kdushá
elevada”
(Sijot HaRav Tzvi Iehudá, Dvarim pág. 567). De ese
encuentro con esas dos kdushot
debemos comprender que en primer lugar tenemos una kdushá
singular y un
mérito especial que se llama Shabat, ya que Am Israel
es el cónyuge
del Shabat, y esa kdushá llega de lo alto, es
muy elevada, y nos
santifica y eleva. El hecho de estar en Shabat en si santifica
y eleva a
la persona, y si ella lo aprovecha como corresponde, y agrega kdushá,
estudia Torá y se deleita como corresponde, se hace
merecedor de
sentirla más. Y en segundo lugar, de ello nos hacemos
merecedores incluso de
agregar kdushá en la realidad, generar kdushá,
elevar el valor
del tiempo – Am Israel son los que le entregan contenido y
valor a la
vida, revelan el valor y la kdushá de la vida. Y por
ello, la primera mitzva
que fuimos ordenados como pueblo fue “este mes les será el
principio de los
meses” (Shmot 12:2), es decir, la kdushá de las
festividades que emana
de la santificación del principio del mes.
Que seamos merecedores
de respetar como corresponde nuestro Shabat, sentir la kdushá
y
la potencia que se encuentra en él, y de esa forma continuar
luego con la vida
práctica y entregarles valor, contenido y kdushá.
Rav
Shlomó Aviner
Respuesta:
Justo lo contrario,
una piscina mixta es una injuria.
Pregunta:
¿Injuria para
quién?
¡No fue ofendido nadie!
Respuesta:
Es una injuria a la
pureza de Israel, una injuria a la pureza de todas las generaciones,
una injuria
a
Pregunta: ¿Dónde está escrito?
Respuesta:
En el libro “Orot
HaTshuva”: “… el dolor por el gran oprobio que se ofende al gran
espíritu
encerrado en todo lo que nos heredaron nuestros antepasados, que no hay
medida
de su potencia y honor” (Orot HaTshuva 4:9). Es como alguien que ofende
al rey,
una trasgresión en contra del honor majestad. Así
también una piscina mixta es
un oprobio al Reinado de D’s en Am Israel (el Pueblo de
Israel).
Pregunta:
¿Un concepto
nacional?
Respuesta: Nacional espiritual. Junto con el
renacimiento nacional hay que hacer renacer el kodesh (lo
santo), y no
arruinar el kodesh. Y también en el libro “Orot”:
“Ahora ha
llegado la clara señal, y somos llamados en nuestro renacimiento
nacional de
reclamar el oprobio de toda la persona, el oprobio del alma Divina que
fue
entregada en nuestras manos para elevarla y enaltecerla, el alma Divina
viva”
(Orot 101). No es sólo un insulto del espíritu de Israel
sino que también un
oprobio del espíritu puro de todo el género humano, que
hasta no hace tanto
tiempo incluso los corruptos de entre ellos de todas formas cuidaban
del
recato.
Pregunta:
¿Pero qué tiene
que
ver con el nacionalismo?
Respuesta:
Hay un artículo en
el libro “Orot” llamado “el alma del nacionalismo y su cuerpo”
(Orot
132). De la misma forma que el hombre no tiene sólo cuerpo, como
los animales,
sino que tiene alma, así también una nación
necesita alma. De lo contrario,
caerá. El estado, el ejército, son una
preparación, son una base (véase Orot
pág. 160 inciso 7). Pero si no es una preparación para
nada, se cae. Así cayó
el Reinado de Shaul, porque vio en sí mismo como el todo, y no
como la
preparación de un reinado más elevado. Así nos
quieren hacer caer nuestros
enemigos.
Pregunta:
¿Qué enemigos?
Respuesta:
¡¿Nos faltan
enemigos?!
Tenemos muchos en el mundo. Intentaron exterminarnos a través de
las guerras, y
no lo lograron. Gracias a D’s que nos salvó a través de Tzaha”l
(Ejercito
de Defensa de Israel), su fiel sirviente. Entonces ellos intentan
exterminarnos
en el plano cultural, e inundan nuestro país con la cultura
más corrupta, que
introducen en todo lugar, y sobre todo en Tzaha”l.
Pregunta: ¿Entonces, qué haremos para no caer
en la trampa? ¿Estudiaremos el Shuljan Aruj (libro de halajá
por
excelencia)?
Respuesta:
Alcanza con
estudiar la primera palabra del Shuljan Aruj: “Se
fortalecerá”.
¡Fortalecerá!
El cometido de esta sección es
familiarizar a los lectores con las pautas básicas del Shabat.
Cada uno
debe aconsejarse con la autoridad rabínica en su comunidad en
cuanto a los
detalles de las numerosas y a veces complejas halajot del Shabat,
y no limitarse a lo escrito en esta sección.
Encendido de las velas
Acostumbran las mujeres a bañarse y
vestir las ropas de Shabat antes de encender las velas, y
bienaventuradas
son[1].
En los días cortos, cuando los
preparativos se continúan hasta la entrada del Shabat,
la mujer debe
apresurarse para que pueda bañarse y vestirse antes del
encendido de las velas,
y es bueno recordárselo[2].
Y si se demoró, es mejor que
encienda las velas cuando está vestida con las ropas de todos
los días, a que
llegue, D’s no lo permita, a trasgredir el Shabat cuando se
demore con
el bañado y el vestido de las ropas de Shabat[3].
Antes de encender las velas, la
mujer debe rezar Minja, porque después del encendido no
podrá rezar ese
rezo del viernes, según la costumbre que con el encendido de las
velas recibe
el Shabat, como fue explicado anteriormente[4].
Si el tiempo es corto, es mejor que
no rece Minja, si por ello llegará a demorarse con el
encendido y
llegará a trasgredir el Shabat. Y completará el
rezo de Minja
rezando Arvit dos veces[5].
[1](Shuljan Aruj 262, Mishná Brurá inciso 11. Kaf
HaJaim 263 inciso 35).
[2](Allí, Mishná Brurá). Y en el libro
Zijru Torat Moshé y Likutei Maari”j
escribieron que la costumbre es que el esposo no se dirige al Beit
HaKneset
hasta que encienden las velas en su casa, para recordarle a su esposa,
porque a
veces cuando se baña y viste las prendas de Shabat se demora con
el encendido
de las velas.
[3](Allí, Mishná Brurá).
[4](Shuljan Aruj 263, Mishná Brurá inciso 43).
[5](Allí).
Y en Kaf HaJaim (allí, inciso 35) escribió que
hará una
condición, que no recibe el Shabat con el encendido de las velas
[como será
explicado más adelante], y entonces podrá rezar Minja
luego del encendido [y
puede que eso depende de cuánto tiempo queda hasta la puesta del
sol].
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