Alumbrar
basado en materiales de Majón Meir
Parashat Ki Tetze 14
de Elul 5776 No
1086
Rav David
Landau
Amalek es un asunto muy genérico, la
antítesis de la kdushá (santidad)
genérica de Am Israel (el
Pueblo de Israel). Llegamos a la gran oposición a Am Israel.
Hay diferencias entre Amalek y los 7
pueblos de Knaan. Con estos últimos tenemos conflictos
políticos o religiosos,
pero ellos no son la antítesis de Am Israel. Y lo que
fue dicho en
cuanto a ellos – “no dejarás vivir ningún alma” (Dvarim
20:16) – es porque
ellos rinden culto a otros dioses en Eretz Israel (
Por ello, “borraré la memoria de Amalek” (Shmot 17:14), a
través de
D’s, y “borrarás” (Dvarim 25:19) a través del reinado de
Israel que se
revelarán a través de la gran depuración de la
edificación de Am Israel
y
Rav
Shlomó Aviner
Ve a estudiar enfermería. Pero sólo con
una condición: Que tienes buen corazón. En general, si no
tienes buen corazón,
es muy severo. Pero seguramente que la profesión de
enfermería no te es
adecuada. Pero si tienes buen corazón, esa profesión te
espera, y de día en día
serás más buena.
Debemos agradecerle a Florence
Nightingale, esa piadosa gentil, vanguardista de la enfermería,
que la
transformó en una profesión ordenada y moderna, estudiada
y profundizada. Dicho
sea de paso, sus padres que pertenecían a la clase alta
británica se opusieron
terminantemente a que ella se ocupe de esa profesión, porque no
es conceptuada como
una profesión respetable. Gracias a D’s, ahora es muy
respetable. Es cierto que
no se gana mucho dinero con ella, pero no es tan terrible. Se gana
muchos
dolores de cabeza, pero también mucha satisfacción, un
poco de recompensa en
este mundo y mucha recompensa en el Mundo Venidero.
Y por supuesto, debemos agradecerle a esa
gran mujer, Henrietta Szold que fundó en nuestro país la
primer escuela para
enfermeras. Y desde ese entonces, gracias a D’s, nuestra santa tierra
se colma
de enfermeras – pero no es suficiente. Duele el corazón. Hay
también muchas
enfermeras árabes: Muy bien. Pero faltan enfermeras
judías. Te esperan a ti.
¡Qué trabajo amplio y responsable, que
exige tantos papeles y tantas aptitudes! Cura y prevención,
dosis de remedios y
vendaje, apoyo en operaciones y nacimientos, interpretación de
resultados de
análisis y toma de decisiones.
Sí. Una enfermera no es un pequeño
empleado que cumple las órdenes del médico. Es
independiente en gran forma. A
veces incluso descubre errores del médico. Gracias a D’s es muy
extraordinario,
pero también pasa. Todos somos personas.
Se necesita conocimiento, práctica,
escucha, misericordia. Sí, una enfermera es también una
pequeña educadora. Por
ello la mayoría de las enfermeras son mujeres, porque es una
profesión
maternal. Por supuesto, también tú, ve a ser enfermero.
Enfermeros faltan más
aún, sobre todo judíos, es una gran mitzva.
Ser enfermera no es sólo una profesión, es
una mitzva. Una mitzva continua, en cada momento,
día y noche. Es
una vocación. Es una misión. Es culto a D’s. Una labor de
entrega. Como dice el
Rav Kuk: “Genialidad de entrega” (Orot HaKodesh Guimel 313).
Entregar es lo más importante en este
mundo. Es cierto que en nuestro mundo valorizan al que hace mucho
barullo,
mucha impresión. Pero es mentira. Así escribe el Rav Kuk:
“Luego de todo el
barullo de todo tipo de artimañas… y luego de la
profundización más honda en el
sistema de los secretos esotéricos, llegamos a la
conclusión que la labor de la
persona en la práctica debe ser añadir bien en el mundo,
entre la persona y su
prójimo” (Orot HaKodesh Guimel 315).
Sí, eres tú. Que te ocupas de una labor
de entrega. Tú que cuidas con tu cuerpo y tu alma de los
enfermos, los lisiados
y los desahuciados. Te preocupas de los enfermos de toda edad, de su
bienestar
y su honor. Descubres que quizás el enfermo sufrió de
ataques de violencia, o
condiciones de falta de higiene.
Florence Nightingale también era una estadista
prodigiosa, y demostró con la ayuda de la estadística
médica en el ejército
inglés en sus guerras en el oriente la importancia de la
correcta higiene, y de
esa forma redujo los casos de muerte de un 80% a un 2%. Una vez ella
dijo:
“Para entender los pensamientos de D’s, debemos saber estadistas…”.
Pero volvamos a nuestro tema. Ve a
estudiar enfermería. Qué nombre bello: Ajot (enfermera,
en hebreo). Es
cierto que el origen no es nuestro, pero lo convertimos. Tú
realmente eres una Ajot
[en hebreo, Ajot quiere decir enfermera y también
hermana. N. del
T.].
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