Majón
Meir |
Teléfono: 972-2-6511906 fax: 972-2-6514820 |
Con
quién me casaré?
Rav
Shlomó
Aviner (Beahava
Ubeemuna No625)
- No es nada
sencillo. La mayoría de las personas no logran hacerlo. Hay
incluso toda una
ciencia, llamada “Teoría de Toma de Decisiones” que se ayuda de
herramientas
matemáticas, y es muy utilizada por estrategas militares y
economistas.
- Pero yo no
la estudié, y a pesar de ello debo decidir ahora la
resolución más importante
de mi vida: Con quién casarme.
- Por qué te
parece que esa resolución es tan importante?.
- Porque no
está relacionada sólo con algún plano determinado
de mi vida, como la elección
de profesión, sino que está relacionada con toda la vida.
Y también es una
resolución sin posibilidad de regreso – por lo menos así
rezo que sea.
- Entonces,
debes definir por qué deseas casarte, y según ello
determinar los criterios
según los cuales deberás elegir tu pareja.
- Bueno. Yo
deseo una compañera para toda la vida. “Compañía,
o mejor morir”. Una compañera
para toda la vida es para mí un asunto de vida o muerte – y a
pesar de ello, yo
vacilo y continúo vacilando ya muchos años.
- Tú vacilas
porque deseas un cónyuge que tenga todas las virtudes...
- Acaso no es
una pretensión legítima?. A fin de cuentas, me
casaré sólo una vez!.
- No. De esa
forma no te casarás ni una vez... Nunca encontrarás una
compañera para toda la
vida exactamente como tú pretendes que sea. Por ello, debes
decidir qué es lo
más importante para ti, y sopesar el resto. Vuelvo a
preguntarte: Por qué
buscas una compañera para toda la vida?.
- No entiendo
tu pregunta.
- Te lo
explicaré. Hay distintos tipos de compañías, como
dice el Ramba”m en su
comentario a
- Yo
justamente creo que sí es el tema.
- Me alegra
que así pienses.
- Por qué?.
- Lo explicaré
más adelante. Hay, entonces, tres tipos de
compañías: Una compañía de
conveniencia, una compañía de descanso, y una
compañía de elevación. Un
compañerismo basado en la conveniencia, es como un socio de
negocios. Un
compañerismo de descanso, tiene por objetivo proporcionar
serenidad de
espíritu. Y un compañerismo de elevación, es una
unión persiguiendo un ideal
común.
- Esos tres
tipos de compañerismo son exclusivistas?.
- Por supuesto
que no. Pero los criterios serán distintos. Si tú buscas
una compañera de
conveniencia, debes buscar una muchacha inteligente, trabajadora,
ordenada,
virtuosa, efectiva, con una buena profesión y rica todo lo
posible. Pero si
estás buscando una compañera de descanso, con la que te
sientas bien en su
compañía, con la que disfrutas y le puedes contar tus
secretos, entonces debes
buscar una muchacha simpática y agradable, que hace despertar tu
cariño y tu
amor por ella, y con la cual las charlas de corazón surgen
fácilmente. Y finalmente,
si tú buscas una compañera de elevación, que
comparta contigo el mismo ideal de
rendirle culto a D’s en general, y el criado de los niños en
particular, debes
buscar una muchacha con buen corazón, con buenas virtudes,
temerosa de D’s, con
cualidades maternales y seria.
- Pero no se
puede una cosa sin la otra!.
Si no nos amamos, no podremos trabajar juntos como padres. Y si ella
transforma
la casa en un caos, yo perderé mis estribos! – yo me conozco.
- Por
supuesto. En toda relación de pareja existe esos tres
componentes. La pregunta
es: Cuál es el componente crítico?. Cuál es la
temperatura de cada uno?. En qué
estás dispuesto a ceder mucho, y en qué estás
dispuesto a ceder sólo un poco?.
- Tú sabes que
ahora me ahora me has puesto frente una decisión más
difícil que al
principio...
- Por qué?.
- Te lo diré
con un refrán: “Dime qué tipo de pareja buscas, y te
diré quién eres”. Ahora
debo decidir quién soy y qué deseo ser en mi vida, y
cuánto estoy dispuesto a
esforzarme en mi matrimonio a lo largo de toda la vida.
- Por eso me
alegré cuando hablaste de esfuerzo. Mi amigo, tú buscas
una compañera de
elevación!.
- Me has
ayudado mucho. Te lo agradezco de corazón.
- Como
agradecimiento, por favor, cuando te cases envíame una
invitación. Me alegrará
mucho.
Es posible leer
la publicación de esta semana y las anteriores en www.alumbrar.org. Para recibirla
directamente a
su casilla
de correo electrónico, escríbanos a suscribame@alumbrar.org