Majón
Meir |
Teléfono: 972-2-6511906 fax: 972-2-6514820 |
Un
alumno estúpido
Rav
Shlomó
Aviner (Beahava Ubeemuna No612)
No se necesita ser un genio para
comprender qué es lo que eso significa: No hay pretensiones de
un estúpido. Mis
maestros en los primeros años de escuela no esperaron que llegue
a ningún
logro, por supuesto. Como muchos alumnos, yo deseaba contentar a mis
maestros –
y traté de satisfacer sus expectativas. Fui un pésimo
alumno en los tres
primeros años de escuela, pero mis maestros no estaban
decepcionados: Estaban
contentos, de momento que cumplía con sus pretensiones. Y yo
estaba contento
que ellos también lo estaban. Todos estábamos contentos –
y yo, era otro más de
los que pierden en el partido de la vida...
Tuve suerte – más que muchos otros
alumnos. En cuarto año, cuando tenía nueve años,
llegué a la clase de la señora
Alexa. Mientras que los maestros en los primeros años de mis
estudios eran
mayores, y estaban bien atrincherados en los resultados de los
exámenes de IQ,
la señora Alexa acababa de terminar sus estudios no hace mucho,
y no conocía
los exámenes de IQ – o no le importaba demasiado sus resultados.
Ella creía que
yo era capaz de mucho más – y me lo exigió. Y
después, me exigió más aún – y lo
recibió!. Por qué?. Porque yo quería satisfacer
sus expectativas, más aún que
las de los maestros anteriores...
La señora Alexa no se extraño en lo más
mínimo - pero yo si me maravillé -
cuando mis logros sobrepasaron todas las expectativas. Me
convertí
rápidamente en un alumno sobresaliente, y así fue desde
ese entonces".
Así escribe el Profesor Robert
Sterenberg – uno de los psicólogos más famosos de
nuestros tiempos, y el
Presidente de
También escribe: "En mi último año
de estudio en la academia, me aconsejé con el decano de
La señora Alexa produjo toda una
revolución en mi vida. Si hubiese tenido otra maestra en cuarto
de escuela,
seguramente estaría ahora trabajando como limpiador en mi
oficina en
"En cuarto año descubrieron que
soy disléxico, y desde ese entonces yo me convencí que
soy estúpido, y casi no
estudié nada hasta mi segundo año en la ieshiva. Entonces, decidí estudiar
toda
Una vez, una persona fracasó en las
pruebas para ser oficial del ejército. Por lo general,
algo así es como un veredicto final – pero
él no se desalentó, trajo recomendaciones, nuevamente se
presentó – y volvió a
fracasar. A pesar de ello se empecinó, esperó un poco, y
nuevamente se presentó
– y volvió a fracasar por tercera vez. Pero la cuarta vez
triunfó, y con el
tiempo se transformó en el oficial más importante de Tzaha"l (Ejército de Defensa de
Israel) – el Comandante en Jefe Shaul Mofaz!.
Y salvando las grandes diferencias,
elevándonos más:
"Me acosté en mi cama, y mis
padres pensaron que me dormí. Escuché a mi padre que le
decía a mi madre: 'El
maestro nuevamente se quejó de nuestro hijo, que se
escapó del Talmud Torá (centro de estudio de
Es posible leer
la publicación de esta semana y las anteriores en www.alumbrar.org. Para recibirla
directamente a
su casilla
de correo electrónico, escríbanos a suscribame@alumbrar.org