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Estado laico, o Reinado Divino?
Rav Shlomó Aviner
(Beahavá Ubeemuná No530)

A nuestro patriarca Avraham le fue dicho: "Y te haré una gran nación" (Bereshit 12:2). Y también está escrito "y vosotros Me seréis un reinado de sacerdotes y una nación santa" (Shmot 19:6) - la base del Trono Celestial en este mundo (Orot, pág. 160).
Pero desgraciadamente, muchos piensan actualmente que nuestro estado es un estado laico - como todos los otros estados. Por ello, los jaredim (ultra-ortodoxos) se apartan de él, los que visten kipa srugá (tejida) vacilan, y los jilonim (laicos) se sienten satisfechos.

En su momento dijo el Gaón (genio del estudio de la Torá) el Rav Itzjak Raines - fundador del movimiento HaMizraji - que el Movimiento Sionista vistió un aspecto laico intencionalmente por parte de D's, porque si hubiese vestido un aspecto religioso los jilonim se habrían apartado, y no recibirían su recompensa. De esa forma, ellos fueron partícipes del Movimiento Sionista, y más tarde también los religiosos se adherirán.
Pero cómo podrán adherirse a un estado que aparenta ser laico?. Cuando comprendan el principio esotérico de la "preparación" y de la "progresión". Porque la realidad no tiene alas para elevarse en un instante, sino que se debe marchar lentamente, a su ritmo. Y también cuando fue fundado el reinado en la época del rey Shaul, todos los sabios pidieron: "Pon sobre nosotros un rey que nos gobierne como es usanza de todas las naciones" (Shmuel Alef 8:5). Shaul era un rey tzadik (justo), pero su país era laico, y por ello sobrevinieron duras crisis. Hasta que llegó David y edificó el Reinado de D's en la tierra. Pero también la primer etapa del reinado de Shaul tuvo mucho valor, en comparación con la anarquía de la época de los Shoftim (Jueces) en la que "en aquellos días no había rey en Israel, cada cual hacía lo que era correcto a sus propios ojos" (Shoftim 17:6, 21:25). La unión de por sí, es un noble ideal. La responsabilidad nacional de por sí, es un encumbrado ideal. Y sólo en base a esos cimientos se puede edificar un nivel más elevado de Reinado de D's en la Tierra.
Todo eso cuando se observa la historia desde una perspectiva racional. Pero cuando se la observa desde una perspectiva interna esotérica, se comprende que el anhelo que mora dentro de la Nación de Israel, de regresar a su tierra y su patria, en el fondo es la ansía de D's, en forma consciente o inconsciente.
Las crisis que encontramos en el camino - que no se encuentran sólo en relación al estado, sino que a todo lo largo y lo ancho de nuestra vida - tienen su profunda raíz en la crisis de fe.
La razón de esa crisis no es el desmoronamiento de los ideales: Por el contrario, por el hecho que nuestra generación está sedienta de ideales elevados, y no los encuentra, entonces cae presa del desaliento y la negatividad. Nuestra generación exige la confirmación de todo el patrimonio espiritual por el que nosotros nos sacrificamos. Pero esa corroboración se demora, porque fue dejado de lado el estudio del aspecto espiritual de la Torá.
Pero el anhelo por D's se esconde dentro de la generación, en forma semejante al alma que se esconde en el cuerpo, y como el Mundo Venidero se esconde en el mundo actual. El Rav Kuk explica que el anhelo de la nación de regresar a su tierra y a su patria, en realidad hay en ella un resplandor de tshuvá (arrepentimiento sincero), sólo que esta cubierto por cortinas que impiden verlo (Orot HaTshuva 17:2). La gueulá (Redención) que surge frente nuestro se encuentra en lo más recóndito del alma de Kneset Israel (el alma nacional de Am Israel), y allí es elaborada.
Por ello, debemos tener paciencia y añadir fulgor en la nación, del que provendrá la salvación.
 

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