Parashat Ki Tetze 14 de
Elul 5782 1375
Cuando
salgas
Rav
Eran Tamir (reimpresión)
Por supuesto que deseamos una vida rutinaria correcta, según el
orden
normal de las cosas: Paz, éxito en la vida de pareja y la
educación de los
hijos, una posición económica sólida, etc. Y
debemos hacer todo lo posible para
que nuestra vida se dirija en la forma correcta y adecuada. Pero la
vida está
colmada de situaciones extraordinarias, parte de ellas imprevistas, y
el dolor
y el sufrimiento en esas situaciones pueden ser muy grandes.
Podemos decir que lo que
Por ello, justamente en
El
principal veneno
Rav
Shlomó Aviner
Bienaventurados
somos que tenemos un estado, por la gracia de D’s. Pero todavía
nos encontramos
en la mitad del camino, y muchas cosas deben ser corregidas. Distintas
personas
señalan distintos problemas: Religiosos, morales, nacionales,
sociales, de
seguridad, económicos y otros. No hablaremos ahora de
quién tiene razón y quien
no. Pero todos ellos se desentienden del principal veneno: ¡Lashón
HaRra (calumnias)!
¿Cómo
puede ser? ¿Cómo es que personas apreciadas y delicadas
se permiten caer en ese
pecado tan severo? Tal parece que ese Ietzer HaRra (mal
instinto) es muy
hábil, y logra envolver a la persona con las telas de
araña de las excusas. Hablan
alto respecto a Ahavat Israel (amor por todo integrante del
Pueblo de
Israel) y unión, pero finalmente utilizan palabras bajas.
Lamentablemente,
ese problema no es nuevo. Ya en la Gmará dijeron que
todos pecan hablando
Lashón HaRra, o por lo menos “polvo de Lashón
HaRra”. ¿Y qué es
peor que la destrucción del segundo Beit HaMikdash (El
Templo)? A pesar
que se ocupaban de la Torá y las mitzvot y de la
bondad, entre
ellos había odio gratuito, es decir, Lashón HaRra,
como lo demuestra el Jafetz
Jaim al principio de su libro, y por eso fue destruido.
Aprendemos
de ello que es un pecado muy severo. Y después de lo que dijeron
nuestros sabios,
que ese pecado es equivalente al asesinato, culto a otros dioses y
relaciones
prohibidas, y también la herejía – no hay necesidad de
agregar nada más.
Pero los
portones de las excusas no se cerraron frente al Ietzer HaRra,
y él
engaña a los que hablan Lashón HaRra, les dice
que se trata de un caso
excepcional, que es una necesidad, que esta permitido, que es lo que se
llama Lashón
HaRra para bien. Pero no es nada sencillo permitirlo. Como una
persona que
necesita trasgredir el Shabat por peligro de muerte, que revisa
tres
veces si realmente está permitido – en este caso se debe revisar
siete veces.
Y estas
son las condiciones:
1. Que
lo hayas visto tú mismo, o lo has escuchado de otros y lo has
verificado.
2. Estas
seguro que se ha hecho algo prohibido según la halajá.
3. Ya
has intentado reprimir al trasgresor con amabilidad.
4. No
exageres y no omitas detalles que pueden cambiar todo para mal.
5.
Cuidarse de no provocarle al trasgresor un daño mayor del que
corresponde según
la halaja.
6. No
hay otra forma de actuar para bien en ese tema, salvo contar lo que
sucedió.
7. Toda
tu intención es para bien, y no por odio o algún otro
interés.
El que
cuenta Lashón HaRra diciendo que es para bien y se
cumplen las siete
condiciones - ¡que se levante! Por ello, nuestros sabios dicen
que las palabras
de la persona deben salvar varios obstáculos antes de salir: Los
dientes, los
labios…
Por supuesto,
no se trata de una corrupción personal sino que de un deterioro
social. En la
antigua Roma, el que contaba calumnias era castigado con el exilio. No
porque
los romanos eran tzadikim, sino que lo veían como un
peligro para la sociedad.
No se necesita la Torá para comprenderlo, alcanza con la
moralidad y el
raciocinio naturales.
Incluso
Rossini que escribió “El Barbero de Sevilla” dedicó un
capítulo a la calumnia.
Pobre de
nosotros de las redes sociales, del Internet, el Facebook y similares,
que están
colmados hasta el final de desangrados de Lashón HaRra,
ciberacoso y
similares.
Bienaventurados
somos que fuimos merecedores de un enviado Divino singular de la pureza
de la
palabra, el Jafetz Jaim, que nos entregó dos libros.
Pero debemos estudiarlos
a diario. El estudio del libro Jafetz Jaim genera el
conocimiento exacto
de la prohibición, y el libro Shmirat HaLashon genera la
imposibilidad anímica
de contar Lashón HaRra.
Y no por
azar decimos al final de nuestros rezos: “Mi D’s, cuida mi lengua del
mal y mis
labios de decir engaño”.
Meorot
HaShabat
El cometido de esta sección es
familiarizar
a los lectores con las pautas básicas del Shabat. Cada
uno debe aconsejarse
con la autoridad rabínica en su comunidad en cuanto a los
detalles de las numerosas
y a veces complejas halajot del Shabat, y no limitarse
a lo escrito
en esta sección.
Muktze
Goteo de agua
Agua de lluvia que gotea del techo
en la casa o similar, si el agua es apta para bañarse con ella o
beberla, no es
Muktze y está permitido colocar un recipiente donde gotea
para que el
goteo no ensucie el suelo de la casa. Y si el recipiente se
llenó de agua, está
permitido moverlo y tirar el agua, y volverlo a colocar en ese lugar
para que
junte el agua que gotea[1].
Pero si el agua no puede ser
utilizada para nada, [ni siquiera para darle de beber a algún
animal] es Muktze
y está prohibido colocar un recipiente para que gotee sobre
él, porque anula el
utensilio de su uso[2],
ya que cuando el agua gotee sobre él estará prohibido
moverlo[3].
Goteo del aire acondicionado
En los aparatos de aire
acondicionado comunes en las casas, la humedad del aire se condensa
sobre los
tubos de enfriado y se transforma en agua, que sale a través de
un caño delgado
fuera de la casa, y a veces ese caño se tapa y el agua gotea
dentro de la casa.
Escribieron los poskim
(sabios que determinan la halajá) que esa agua que gotea
del aparato es Muktze
[por ser Nolad], y entonces no se debe colocar algún
recipiente debajo
del goteo para que el agua caiga en él, porque de esa forma el
recipiente no
podrá ser movido, y es anulado del uso para el que estaba
preparado[4].
Pero si en el recipiente hay algún
otro objeto que es permitido moverlo, y ese objeto le es más
importante que el
agua que se junta en él, se puede mover el recipiente con el
agua en él [véase
anteriormente] [5].
Y por ello, cuando quiere colocar
un recipiente bajo el goteo de esa agua, se puede poner en él
algún objeto
permitido, y de esa forma no anula el recipiente del uso para el que
estaba
preparado.
[1](Shuljan Aruj, Orej Jaim 338 inciso 8). Y el
agua de la Lluvia no es Muktze o Nolad, y puede utilizarla
(allí, Mishná Brurá
inciso 30. Kaf HaJaim inciso 60).
[2]Y en el Shuljan Aruj (allí)
escribió que la
razón es porque no se hace en un principio Graf Shel Rei. Y
aclaró el Biur
Halajá (allí, comienza asur) que la principal
razón es por Bitul Kli MeEijano,
pero si estuviese permitido hacer en un principio Graf Shel Rei no
sería
considerado Bitul Kli MeEijano en absoluto, ya que puede enseguida
quitar el
agua por ser Graf Shel Rei, y cuando se puede quitar el Muktze del
recipiente
enseguida, no es considerado Bitul Kli MeEijano [como fue aclarado].
Pero de
momento que no se hace Graf Shel Rei en un principio, necesariamente
debe
consentir con que el agua quede en el recipiente, y entonces es Bitul
Kli
MeEijano.
[3](Allí, Mishná Brurá inciso
31 y Biur Halajá allí).
A no ser que sea en un lugar donde habita en forma fija, y le es
inmundo dejar el
recipiente con el agua allí, y entonces está permitido
quitarlo con el agua,
como Graf Shel Rei (allí, Shuljan Aruj y Mishná
Brurá inciso 33).
Y en el Biur Halajá
(allí) escribió que esa determinación del Shuljan
Aruj se basa en el Ramba”m.
Mientras que el Tur discrepa. Y citó al Jaiei Adam que si hay
una gran
necesidad hay que fiarse en el Tur, que determinó que incluso
cuando el agua no
es apta para nada, está permitido colocar un recipiente debajo
del goteo.
También escribió el
Biur Halajá (allí) que lo que acostumbran volcar agua
sobre las manos por la
mañana cuando despiertan en un recipiente, a pesar que ese agua
por supuesto
que no es apta para lavar o darle de beber a algún animal [como
es aclarado en
el inciso 4], o el agua de Maim Ajaronim, necesariamente debemos decir
que la
razón por la que no se teme de Bitul Kli MeEijano es porque se
fían en el Tur,
que permite colocar un recipiente debajo del agua que gotea en Shabat,
y no lo
prohibió por Bitul Kli MeEijano.
Y agregó el Biur Halajá
y escribió que también parece que esa agua no es llamada
que no sea apta para
nada, porque no está prohibido utilizarla, solo que de momento
que por el mal
espíritu en ellas no se las utiliza, y solo agua con barro que
gotea del techo
o prohibida de alguna forma, incluso según nuestros sabios [como
Tevel de
nuestros sabios que fue mencionado por los poskim] es considerada agua
que no
es apta para nada.
[4]Véase en la acotación anterior, en
cuanto al
Biur Halajá citando Jaiei Adam, que en caso de gran necesidad
hay que fiarse
del Tur y permitirlo. Y véase Mishná Brurá (266
inciso 27) que tratándose de
una gran pérdida de dinero hay quienes permiten Bitul Kli
MeEijano.
[5](265, Mishná Brurá inciso 6. Kaf
HaJaim inciso
10).