Parashat Pekudei 2 de
Adar Bet 5782 1349
El
Arca del Testimonio
Rav
Ziv Rave
“Pondrás
allí el Arca del Testimonio, y resguardarás
el Arca con el Velo” (Shmot 40:3).
El utensilio más interno y más Kadosh (santo)
en el Mishkan (Tabernáculo) es el Arca del Testimonio
donde se
encuentran las Tablas de la Ley. El Arca se encuentra oculta
detrás del Velo,
por su kdushá, en el Kodesh HaKodashim
(Sacrosanctorum) donde nadie
puede entrar, salvo el Cohen Gadol (Supremo Sacerdote) en Iom
Kipur
(el Día del Perdón). El Arca está compuesta por
tres cajas sin tapa una dentro
de la otra. La caja interna es de árboles de acacia, insinuando
la Torá
que es “árbol de vida”. Esa caja de madera la puso Betzalel
dentro de una caja
de oro, y otra caja de oro más pequeña introdujo dentro
de la caja de madera, y
recubrió su borde superior con oro. Se encuentra entonces la
caja de madera
cubierta de oro por dentro y por fuera. La caja de oro exterior es un
poco más alta
que la interior, y se eleva hasta la grosura de la cubierta de oro, y
cuando ella
descansa sobre el grosor de la caja interior y la caja de madera, se
eleva por
encima del Arca exterior una diadema de oro, insinuando la corona de la
Torá
(según Rashi, Shmot 25:11). Es interesante que nuestros sabios
compararon el talmid
jajam (erudito del estudio de la Torá) al Arca del
Testimonio. “La
recubrirás con oro puro, por dentro y por fuera la
recubrirás” (Shmot 25:11), “dijo
Raba, todo talmid jajam que su interior no es como su exterior,
no es un
talmid jajam. Dijo Abaiei, y hay quien dice Rabah Bar Ula, es
llamado
abominable, como dice el versículo ‘cuanto menos el abominable y
perverso, el
hombre que bebe la iniquidad como el agua’ (Iyov 15:16)” (Ioma 72B).
Un talmid jajam es una persona espiritual,
racional y moral, y el orden Divino de la Torá es lo que
guía su vida.
De la misma forma que las Tablas de la Ley se encuentran dentro del
Arca, así
también la Torá de D’s se encuentra gravada en lo
profundo de su ser y
su personalidad. En relación con la sociedad, el talmid jajam
es un poco
asceta, como el Arca que se encuentra cubierta detrás del Velo,
para poder
cumplir su función y para que sea posible su influencia de
calidad interna. Como
el Arca que está cubierta por dentro y por fuera con oro,
así también el talmid
jajam debe ser según la Gmará, para
enseñarte que no es correcto que
haya alguna diferencia entre lo que se encuentra por dentro y lo que se
ve por
fuera, todo debe ser una misma cosa. Sin dos caras hipócritas,
sin intenciones
ocultas, sin adulaciones, sin falta de derechura, sin adornarse con un
nivel
que no le pertenece. Un talmid jajam cuyo interior y exterior
no son lo
mismo, cuyos cuartos ocultos se conducen en forma distinta y contraria
a lo que
se ve por fuera, no es un talmid jajam. La cualidad espiritual
no puede
ser separada (según Mahara”l, Netiv Irat HaShem, cap. 4), el
orden Divino límpido
debe envolver toda la vida, sin zonas oscuras que no están
alumbradas por el
resplandor Divino. Un desconectado entre lo interno y lo externo no le
permite
a la Torá morar como es correcto en él.
Raba que en su estudio comparó el talmid jajam
al Arca cubierta por dentro y por fuera con oro, no quiere descorazonar
a
nadie, sino que dibuja el ideal real. Es cierto que “no hay una persona
tzadika
que no peque” (Kohelet 7:20), de momento que la persona tiene un cuerpo
es propenso
al deterioro y al pecado. La cuestión permanente es ¿a
dónde se inclina su
voluntad? ¿Acaso siempre está ocupado en purificar su
corazón y en el honor de su
D’s, alumbrar todos los pasillos de su ser y santificar sus acciones?
Abaiei
agrega que un talmid jajam cuyo interior no es como su exterior
es
llamado “abominable”, porque según el nivel que le es apropiado
por parte de su
sabiduría, el alejado de ese orden Divino es crítico. La
brecha entre su
interior y su exterior tratándose de toda persona es
depreciable, pero
tratándose de un talmid jajam es mucho peor, porque
él representa la Torá
que toda ella es bien. Desde lo más alto hasta lo más
bajo en la Torá no
hay ninguna intención oculta. La Torá apoda cosas
severas “abominable”,
como el culto a otros dioses, porque es abominable vincularse con
ídolos. Y
también relaciones prohibidas que son una desviación
severa de la ley Divina, “cuidaréis
de Mis leyes” (Vaikra 18:5).
Ese nivel que lo que se espera de un talmid jajam
tiene una consecuencia en el plano de la halajá, ya que
se le devuelve
al talmid jajam algún objeto que perdió sin
pedirle señales, sólo según
lo que le parece a él que es su objeto (Baba Metzia 23B). El
punto de partida de
esa halajá es que un talmid jajam no
engañará, y siempre la
verdad se encuentra en su lengua y su corazón. Es cierto que
tratándose de
circunstancias determinadas tiene permitido decir algo que no es
totalmente
verdad, por humildad, por recato, para no ofender a otros, o cuando
identifica alguna
intención incorrecta por parte del que pregunta (Baba Metzia
23B, véase Rashi y
Tosafot allí).
Un talmid jajam auténtico se ocupa todos sus
días en orientar su forma espiritual a la Torá
Divina, en su conducción
interna y externa. La edificación de su personalidad emana de la
dirección Divina
en la construcción del Arca del Testimonio, que es el centro de
la
manifestación de la Presencia Divina - “la recubrirás con
oro puro, por dentro
y por fuera la recubrirás”.
No
fumes
Rav
Shlomó Aviner
Los
números:
Cada año
mueren por el fumado 6 millones de personas en el mundo.
En los
últimos cien años murieron 100 millones de personas.
Por
fumado pasivo, o coercitivo a pesar de que no fuman ellos mismos,
mueren
600.000 por año.
En el
país mueren 8000 por año.
Por
fumado pasivo, 700.
Israelíes
que se quejan que están expuestos al fumado, hay un 35%.
Entre
los muertos de cáncer, el porcentaje de muertos por
cáncer a los pulmones
causado por fumado, 78%.
El
peligro de un fumador de contraer cáncer de los pulmones es 25
veces más alto que
el no fumador.
En el
cigarrillo hay 65 elementos cancerígenos.
El
porcentaje de fumadores que mueren por fumar es entre un tercio y la
mitad.
El
fumado acorta los años de vida en 10 años.
Cada
cigarrillo acorta la vida entre 5 y diez minutos.
La opinión
de nuestros sabios:
En las
generaciones anteriores, no era conocido el daño que produce.
Ahora está claro.
Los poskim (sabios que determinan la halajá)
prohibieron el
fumado por varias razones:
1. “Cuidaréis
de vuestra alma”. Véase Ramba”m, Hiljot Rotzeaj VeShmirat
HaNefesh, cap. 11.
2. Daño
de la salud, que es una mala virtud y una trasgresión a “te
dirigirás por Sus
caminos” Ramba”m, Hiljot Deot, cap. 4.
3. Molesta
a su compañero.
4. Mata
en forma indirecta, trasgrediendo la prohibición de “no
matarás”.
Otros daños
del fumado:
Daño del
estado físico.
Daño de
los gametos y la fertilidad.
Daño de
la piel de la cara.
Alergia
del aparato respiratorio y los ojos.
Muerte
de cuna para el bebe del que fuma.
Soluciones
para dejar de fumar:
Taller
de rehabilitación gratis, de la mutualista médica.
Chicle
de nicotina.
Parche
de nicotina.
Pastillas
de nicotina.
Pastillas
Zyban.
“Y toda
la maldad como el humo se esfumará”
Meorot
HaShabat
El cometido de esta sección es
familiarizar
a los lectores con las pautas básicas del Shabat. Cada
uno debe aconsejarse
con la autoridad rabínica en su comunidad en cuanto a los
detalles de las numerosas
y a veces complejas halajot del Shabat, y no limitarse
a lo escrito
en esta sección.
Muktze
Trozos
que fueron tirados a la basura
Un utensilio que se
quebró, si sus trozos son aptos para hacer con ellos
algo [y se acostumbra a utilizarlos de esa forma], los trozos no son Muktze
y está permitido moverlos en Shabat, como fue aclarado.
Pero si el dueño tiró los trozos a la basura, a veces eso
anula su
condición de utensilios, y se transforman en Muktze y a
veces no.
Trozos de un utensilio que antes de la llegada del Shabat su
dueño
los tiró a la basura o a la calle, a pesar de que los trozos
todavía son aptos
para algún uso, de todas formas de momento que fueron tirados
fue anulada su
condición como utensilios ya a la entrada del Shabat, y
entonces son Muktze
y está prohibido moverlos o utilizarlos[1].
Por ejemplo: Una silla que se le rompió el respaldo, y su
dueño la tiró
a la basura o a la calle antes del Shabat, a pesar de que
todavía puede
ser utilizada para sentarse, de todas formas de momento que fue tirada
a la
basura fue anulada su condición de utensilio, y es Muktze
y está prohibido
para toda persona moverla[2].
Trozos de utensilios que fueron tirados en Shabat mismo, si son
aptos para algún uso, está permitido moverlos, porque de
momento que a la
entrada del Shabat todavía eran un utensilio, no son Muktze.
E
incluso si se rompieron antes de Shabat, si fueron tirados en Shabat
mismo no son considerados Muktze[3].
Por lo tanto, una silla cuyo
respaldo se rompió, si fue tirada sólo en Shabat,
no es Muktze y
está permitido moverla y sentarse en ella.
Un utensilio entero
Un utensilio entero que fue tirado a
la basura, incluso si fue tirado antes de Shabat, no es Muktze
y
está permitido moverlo, porque de todas formas es considerado un
utensilio. Y a
pesar de que su dueño lo tiró y no lo considera apto para
uso, de todas formas
no es Muktze, porque la opinión de su dueño es
anulada en comparación
con la opinión de todas las personas que lo consideran ser
utensilio[4].
[1](Shuljan Aruj, Orej Jaim 308 inciso 7).
[2]Y a pesar de que los trozos de los utensilios
son aptos para ser usados por una persona pobre, de momento que para
los dueños
no es así, y lo excluyó de su pensamiento, es Muktze para
todos, ya que algo que
es Muktze para su dueño rico, es Muktze también para el
pobre (allí, Ram”a). Y
véase Kaf HaJaim (allí, inciso 69) que escribió
que de la formulación del Ram”a
tal parece que es Muktze para todo pobre, incluso para el pobre que no
se
encuentra en la casa del rico. Pero el Ba”j determinó que lo que
es Muktze para
el rico es Muktze para el pobre que está en su casa porque es
secundario a él,
pero no para el pobre que no vive en su casa.
[3](Allí, Mishná Brurá inciso
32. Kaf HaJaim
inciso 66).
[4](Allí, Biur Halajá comienza veim
zarka. Mishná
Brurá allí, inciso 51).