“Y
recordaré la tierra”
Rav
Iaacov Filver
¿Cómo se forjó ese vínculo? El tema es
aclarado en el libro “Tehilim”: “El pacto que hizo con Avraham,
y Su
juramento a Itzjak, y estableció para Iaacov como estatuto, a
Israel por Pacto
Eterno, diciendo; a ti te daré
De la misma forma, no fuimos nosotros los
que le conferimos a la tierra su propiedad singular. Su singularidad y
su kdushá
(santidad) fue anterior a su entrega a Am Israel, y justamente
por ello
le fue entregada esa tierra a Am Israel. Como es aclarado en el
Midrash:
“Le dijo D’s a Moshé, la tierra Me es apreciada, e Israel Me es
apreciado. Haré
entrar a Israel que me es apreciado a la tierra que me es apreciada”
(Bamidvar
Rabah 23). Y también dijeron nuestros sabios allí: “Hay
personas que son
agradables, y sus vestimentas no lo son. Hay quienes son desagradables,
y sus
vestimentas son agradables. Israel son agradables para la tierra, y la
tierra
es agradable para ellos. Como dice el versículo ‘yo tengo una
buena tierra’ (Tehilim
16:6)”. La kdushá propia de la tierra nos hace concluir
lo que dijo el
Rav Kuk: “Eretz Israel no es algo superficial, una
adquisición externa de
la nación, sólo como un medio para alcanzar la meta de la
unificación, o garantizar
la subsistencia física o incluso espiritual de ella. Eretz
Israel es una
unidad esencial, enlazada con un vínculo de vida con la
nación, apegada a
través de sus cualidades internas con su existencia” (Orot 9).
Según ello, no
puede justificarse una actitud que ve a Eretz Israel
sólo como un
refugio para el pueblo errante, o como una patria a la cual el pueblo
está
unido con lazos históricos solamente, cuando todo su objetivo es
que Am
Israel encuentre en ella su descanso y su terreno, un lugar donde
pueda llegar
a su prosperidad económica y elevar su nivel de vida. Porque
según esa
concepción, no hay ninguna diferencia dónde se encuentre
en el globo terráqueo Am
Israel, y en qué zona de Eretz Israel se asiente – a
condición que
tenga un trozo de tierra que le permita vivir con suficiente seguridad
personal
y nacional. La concepción judía original aprecia a Eretz
Israel por sus
cualidades espirituales singulares, y está sedienta de hacer
despertar su polvo
del letargo, para poder cumplir en ella su meta: Hacer llegar la gueulá
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Hay que
denunciarlos
Rav
Shlomó Aviner
¿Y por
qué no los denuncian? “¡Lashón HaRrá
(calumnias)!”. “Eso puede arruinar
toda la vida de esa persona, no es decoroso, será una
vergüenza – para él y
para su familia”. Por supuesto, no es cierto: Ese tipo de informe no se
encuentra en la categoría de Lashón HaRrá,
y es una mitzva informar
a las autoridades. El niño es pequeño, no puede
protegerse a sí mismo: ¿Quién
lo protegerá? Si algo así ocurre fuera del marco
familiar, quizás la familia lo
defenderá. Pero cuando algo así ocurre dentro de la
familia misma, el niño no
tiene salvación, está perdido.
Por
ello, todo el que se ha enterado de algo así debe denunciarlo.
Por supuesto,
antes que nada hay que hablar con los padres, o con el maestro que lo
maltrata.
Si ellos dejan de maltratarlo y comienzan un tratamiento, todo
estará
bien. Pero si no, es obligación denunciarlos a la policía
o las autoridades del
servicio social.
En el
público jaredi (ultra-ortodoxo) hay quienes arguyen que
está prohibido
denunciarlos: Está prohibido entregarlos para que sean juzgados
por jurados de
gentiles si se encuentra en el exterior, o para que sean juzgados por
jurados
del Estado de Israel en Israel. Pero eso tampoco es cierto: Se trata de
peligro
de muerte para el niño. El autor del libro “Nishmat Avraham”,
cuenta que
le presentó esa pregunta a los grandes sabios de la
generación – el Gaón
(genio del estudio de
Por ello,
todo el que lo sabe debe denunciarlos. A veces, los madrijim en
el
movimiento juvenil se dan cuenta que el niño está tenso,
o angustiado: Deben
informar a las autoridades en el movimiento juvenil. A veces se nota
que algo
le pasó al niño: Esta triste, no actúa, esta
deprimido, cerrado en sí mismo...
todos esos son síntomas que deben preocuparnos. O por el
contrario, de pronto
se comporta en forma muy agresiva, y maltrata a otros niños:
Muchas veces la
víctima se transforma en agresor.
En pocas
palabras, todo ese tipo de cosas deben ser denunciadas - y de inmediato.
Una vez
le pregunte a personas que conocen el tema: "¿Cómo puede
ser que una persona religiosa, temerosa de
D's, que estudia Torá pueda comportarse de esa manera?".
Me
gritaron: "¿Por qué
te haces el que no entiendes? ¿Tú
realmente piensas que una persona anormal que estudie Torá
se
transformará en normal? ¡No! ¡Debe preocuparse de
recibir tratamiento!".
Por
supuesto, ellos tienen razón. Por ejemplo: Vemos que el Ramba"m
no
escribió solamente muchos libros que hablan del estudio de la fe
y de la halajá,
sino que también le pareció importante escribir el libro "Shmoná
Prakim",
que habla del cultivo de las virtudes. Puede que una persona normal
cuando
estudie Torá, en forma natural corregirá sus
virtudes. Pero el que se
encuentra en un punto de partida muy bajo, con eso no alcanza: Necesita
un
tratamiento especial. Y volviendo a nuestro caso, esa persona necesita
un
tratamiento psicológico para poder controlarse a sí mismo.
¡Apiádense
del niño!
En resumen:
Si tú ves algo así – debes salvar al niño y
denunciarlo. ¡Enseguida!
Y que
D's se apiade de nosotros.
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