Parashat Koraj
25 de Sivan
5765 No
519
Editorial Shavei Israel
Anuncia la publicación de la nueva
edición
de:
Incluye
también una concisa guía práctica de Kashrut.
Mayor
información y pedidos:
Tel: 02-625-6230
E-mail: spanish@shavei.org
Liderazgo
en crisis
Rav Eliezer
Jaim Shainvald
El episodio de la controversia
de Koraj gira alrededor del tema del
liderazgo que D's eligió. En nuestro Beit Midrash (centro
de estudio de
Koraj elige atacar a nuestro Rav Moshé en el plano personal,
como si él
distribuyese los cargos importantes a las personas allegadas a
él: "'Bastaos!'
- ustedes habéis tomado para vosotros mismos demasiados cargos
importantes...
'por qué os ensalzáis' - si tú tomaste para ti el
reinado, no deberías haber
designado a tu hermano como Cohen (sacerdote)" (Bamidvar 16:3,
Rashi). Cuando Koraj enrola otras personas para fortalecer su disputa y
niega
el liderazgo de nuestro Rav Moshé, esa controversia pasa a
ser una crisis de
proporciones generales, y pone a prueba el liderazgo de Moshé.
Un liderazgo
auténtico emana del sentimiento de responsabilidad e
interés
del líder por las necesidades del público,
como explica el Rav Kuk zt"l (Orot HaKodesh Guimel, pág. 155):
"Cuanto más se eleva una persona en su aspecto espiritual,
siente más y
más el gran valor del público, el público
comienza a vivir dentro suyo. En
su corazón y en lo profundo de su voluntad él siente las
necesidades del
público, el esplendor del valor de la vida que late en la
totalidad del
público. Y frente a sus ojos el público se presenta como
toda una unidad, él
siente la presencia palpable del público, y se colma de un amor
y un respeto
sin límites por él. Y entonces, él se eleva y
llega a ser un líder ideal del
público. Sus pensamientos se santifican con la kdushá
(santidad) del
público, y su nivel moral se eleva hasta que se transforma en un
tzadik (justo)
para el público". Una persona común y corriente,
siente
responsabilidad e interés por su círculo personal
limitado. Pero un líder
auténtico se eleva a un nivel tal que el radio de
responsabilidad e interés se
expande también a todo el público. Él siente
responsabilidad e interés por el
destino y la vida del público como si se tratase de su vida
propia.
Cuando líderes comunes son atacados en el plano personal, ellos
tienden
a dejarse llevar a ese plano: Defienden su honor e intentan
resguardarse del
peligro que ese ataque implica para su futuro como persona particular,
y no
siempre logran permanecer en el nivel público general -
preocupándose por no
dañar el futuro del público. Sobre todo tratándose
de líderes que se
sacrificaron a sí mismos por el público, y ahora ellos
sienten el
desagradecimiento y la traición por parte de los que se les
oponen. En
contraste, frente al ataque de Koraj en el plano personal, nuestro Rav
Moshé no
se deja llevar al nivel personal. Se trata de un liderazgo sublime, que
se
ocupa de los aspectos esenciales de la vida del público y del
peligro que puede
engendrar esa controversia para él, como nos aclaran nuestros
sabios: "'Y
cayó sobre su rostro' - por la controversia, ya que se trata del
cuarto pecado
del público. Cuando pecaron en el Becerro de Oro - 'Moshé
suplico' (Shmot
32:11). Cuando se lamentaron - 'Moshé oró al Eterno'
(Bamidvar 11:2). Cuando
pecaron los diez espías - 'entonces lo oirán los
egipcios' (Bamidvar 14:13).
Pero en la controversia de Koraj, enflaquecieron las fuerzas de
Moshé!. Como un
príncipe que faltó para con su padre - el rey - y su
amigo lo apaciguó. Una
vez, dos veces, tres veces. Cuando faltó por cuarta vez,
enflaqueció su amigo y
dijo: Hasta cuando continuaré molestando al rey?, quizás
terminará por dejar de
escucharme!" (Bamidvar 16:4, Rashi, citando Midrash Tanjuma).
También en
un momento de crisis como ese, a Moshé le importa más el
destino del público
que el suyo propio. Ese es el modelo del liderazgo y la jasidut (devoción)
en Am Israel, como explica el Ramja"l (Rabí
Moshé Jaim
Luzato) en su libro "Mesilat Iesharim" (cáp. 19): "Pero
también hay otro segundo principio en la
intención de la jasidut,
y es el bien de la generación. Ya que lo adecuado es que
todo jasid
ponga por meta de todas sus acciones el bien de toda la
generación -
hacerlos meritorios y protegerlos. Y eso es lo que dice el
versículo
(Ishaya 3:10): 'Reconoced que al tzadik
(justo) le va bien, porque el fruto de sus
obras comerá', ya que toda la generación come de sus
frutos". Para
desarrollar un liderazgo auténtico de acuerdo a ese modelo, se
le debe hacer
adquirir a la persona capacidad de organización y
dirección, pero no menos se
debe construir sus virtudes personales.
Am Israel se encuentra en una
lucha por su existencia. En este momento, es necesario desarrollar y
reforzar
un liderazgo en base a
Se acostumbra a
relacionar el concepto de liderazgo con el campo militar,
público o político.
Pero muchas veces el liderazgo es puesto a prueba justamente en el
plano de las
virtudes personales, como aprendemos de nuestra Parashá.
Es cierto
que el desempeño de un cargo en el ejército es una buena
escuela de liderazgo y
capacita al individuo particular para enfrentar posibles dificultades
relacionadas con los distintos factores que lo componen. Pero hay
varios planos
significativos en la edificación del liderazgo que es posible
desarrollar
justamente en el Beit HaMidrash - sobre todo en lo que respecta
a la
cristalización de los ideales, edificación de las
virtudes y fortalecimiento de
la personalidad.
En contraste con la
concepción según la cual el "liderazgo" está
ligado sólo con la administración
en marcos públicos, o que su meta es dirigir un grupo de
personas hacia un
objetivo determinado, en nuestro Beit HaMidrash se debe aclarar
que
liderazgo es en primer lugar una cualidad y virtud de la
personalidad.
Liderazgo es estar dispuesto a dirigir un proceso necesario, y
enfrentar las
dificultades que se encontrarán en el camino. De esa cualidad
surge la motivación
de la persona para dirigir su vida, a través de su libre
albedrío, según su fe
y su concepción del mundo, ser dirigente y activo, y ser lo
menos posible dirigido
y pasivo. De ella obtiene la persona la fe en sí mismo, en su
capacidad de
hacer y cambiar, generar procesos de gran influencia, y reducir la
influencia
de poderosos procesos externos que ocurren, en la persona particular y
en el
público. Esa es la fuente del interés por los
demás, de la toma de
responsabilidad y de iniciativa activa. En base a esa virtud, la
persona
debe aspirar a ser partícipe de la vida pública y de
acceder al liderazgo en
distintos niveles - ampliar su campo de responsabilidad e
interés por el
destino del prójimo y de todo el público. Ella es
también la que garantiza la
capacidad de desarrollar un liderazgo que emana de la responsabilidad y
la humildad
- y no de la arrogancia.
Radio
Meir en español
* Nos encontramos
en
"Horario de Verano", por lo que nuestro horario es GMT + 03
Un
pueblo normal en su tierra
Rav
Shlomó Aviner
Respuesta: No comprendo lo que usted
dice. Acaso usted traerá a la mesa una porción de carne
de cerdo y luego
luchará?!. Acaso usted organizará en su casa una
profanación del shabat,
y luego luchará?!. Es cierto que si una persona se encuentra -
en contra de su
voluntad - en una situación de prueba, debe luchar con todas sus
fuerzas para
no pecar en lo más mínimo, pero acaso el que entra en la
jaula de los leones de
los pecados se lo puede llamar "normal"?!.
Es cierto que también en la calle las personas no se visten
normalmente,
y por ello dijo el Gaón (genio del estudio de
Pero cómo se le puede ocurrir a alguien procurarse una actividad
cultural que excita los bajos instintos con el pretexto que
luchará?!. Así fue
determinado en la halajá: "...los libros que incitan los
bajos instintos
como el libro "Emanuel" y relatos de guerras, está prohibido
leerlos... y transgrede la prohibición de 'no os volváis
a los ídolos'... e
incita su mal instinto, y quien los escribió, y quien los
copió, y por supuesto
quienes lo imprimieron, hacen pecar al público" (Shuljan Aruj,
Orej Jaim,
307:16). Y por supuesto películas.
En efecto, según el Rambam la prohibición de
Y también él escribe respecto a ese versículo:
"Esa mitzva
es una base importante de la religión. Porque los malos
pensamientos son la
fuente de la impureza, y las acciones son sus engendros... el pecado
genera
otro pecado, y una mitzva genera otra mitzva (Avot
4:5), ya que
si una vez pensarás satisfacer tu baja pasión, te
dejarás llevar por ella otras
veces... toda persona que se ha acostumbrado a satisfacer sus bajas
pasiones,
el mal instinto se apodera de él más y más cada
día. Mientras que cuando evita
satisfacerlas, cada día se alegrará más" (Sefer
HaJinuj 387).
Mirar en forma controlada es un falso sortilegio, una mezcla de
pecados,
lo contrario de lo que nos ordenó D's: "No os
dejéis llevar tras... vuestros ojos". Acaso en medio de la
película - cuando aparezca una mala escena - el espectador
apagará la
televisión?!. No nos hagamos los inocentes!. Tampoco debemos
ignorar el
terrible daño que la televisión, el Internet - y ahora
también los teléfonos
celulares sofisticados - producen a la familia y la sociedad. Hay
tantas
familias y tantos niños que han sido arruinados por ellos!.
Acaso no sabemos que en todos los países del
mundo existe una correlación entre películas violentas y
la violencia en la
sociedad?!. Es cierto que hay quienes arguyen que esa
correlación no indica que
hay una relación causa-efecto - mirando esas películas
las personas se vuelven
más violentas - sino que esas personas que tienden a la
violencia, prefieren
ese tipo de películas. Lamentablemente, la verdad es que ambas
conclusiones son
ciertas.
Por el contrario, cuando hay un padecimiento
de virtudes hay que dirigirse al otro extremo, dice el Rambam
(Shmoná Prakim
LaRambam, cáp. 4). Él lo indica en cuanto al particular,
y el Rav Kuk lo amplió
también tratándose de todo un público (Arpelei
Tohar). Si la sociedad se deja
llevar tanto tras la inmundicia de los medios de comunicación,
debemos
privarnos en forma extrema de ellos.
Mirar programas sin contenido, depravados,
mentirosos y violentos se llama "ser normal"?!. No es así:
Nosotros,
que nos dirigimos por los senderos de la pureza, somos los normales.
Nosotros,
que respiramos aire puro, que no fue contaminado, somos los normales.
Nosotros,
que saneamos nuestros pensamientos, somos los normales.
Departamento
ibero-americano
Majón Meir
abrió sus
puertas para alumnos ibero-americanos de habla hispana y
portugués, y te invita
a tener esta experiencia única de estudiar Torá en
su ambiente tan
especial en la ciudad de Ierushalaim.
El
programa - dirigido por el Rav Rafael Spangenthal - está
destinado para jóvenes
de diecisiete años en adelante que desean reforzar su identidad
judía por medio
del estudio de
Para más
información los
invitamos a llamarnos o escribirnos:
Director del
Departamento ibero-americano
Rav Rafael
Spangenthal
Tel.: 972-8-9285216
Cel: 972-52-4501467
E-mail: espanol@machonmeir.org.il,
editorial@alumbrar.org