Parashat Beshalaj 13 de
Shvat 5779 1203
Un
camino corto que es largo
Rav Ioram
Eliahu
“Y sucedió que cuando Paro
envió fuera
al pueblo, D’s no los condujo por la ruta de la tierra de los plishtim,
ya que era cercana, pues D’s dijo; no sea que el pueblo cambie de idea
cuando
vean guerra, y regresen a Egipto” (Shmot 13:17). D’s mucho desea llevar
a los
Hijos de Israel a Eretz Israel (
El Ramba”m en su libro “More Nebujim”
explica en extensión que el orden de la dirección Divina
es la edificación de
la persona en forma gradual, “porque no se puede pasar de un extremo al
opuesto
en un momento, y por ello no es posible según la naturaleza
humana que la
persona abandone todas sus costumbres en un momento”.
El Ramba”m lo aprende de nuestra Parashá,
cuando D’s le hizo un rodeo al pueblo por el desierto “y es así
que D’s los
hizo rodear evitando el camino corto, que era la primera meta, porque
sus
cuerpos no eran capaces según la naturaleza de ir por ese
camino. Y D’s los
llevó demorándolos en el desierto hasta que se
fortalezcan, porque los
desiertos y el esfuerzo físico generan el valor, y
también nació un pueblo que
no acostumbraba a someterse y ser esclavo”. Es decir, Am Israel (el
Pueblo de Israel) que salió de Egipto es un pueblo que
está acostumbrado a la
esclavitud, al sometimiento y al temor de su amo, y no se puede
convertirlos en
corto tiempo en un pueblo valeroso y luchador, y por ello D’s los guio
paulatinamente, edificando en ellos valentía y bravura, y en
base a ello podrán
entrar en la tierra y luchar contra los enemigos.
Así aprende nuestro Rav, el Rav Tzvi Iehudá
Kuk el orden de la educación Divino con sus criaturas. “Nos
encontramos aquí
con la conducción Divina que actúa en los laberintos y
complicaciones de la realidad.
La dirección Divina surgió de esa forma por la carencia
del pueblo, aquí se
revela la profundidad del orden de educación Divino para con las
personas. El
llevado de 600.000 personas de Egipto a Ierushalaim no es una
operación
sencilla: Se necesita madurez espiritual para comprender que para ser
merecedor
de la libertad vale la pena sufrir. Junto con ello, a veces hay
necesidad de
tomar en cuenta las debilidades de las personas, y también eso
se conjuga con
el sistema educativo Divino, la política Divina toma en cuenta
la posibilidad
que el pueblo tema de la guerra y se arrepienta de haber salido de
Egipto, y
frente a ello no surge una coerción Divina sino que un arreglo
de la realidad
de forma tal que le sea accesible a las personas y al público”
(Sijot HaRav
Tzvi Iehudá, Shmot 159).
Y también nosotros debemos aprender de la
conducción Divina. Muchas veces deseamos generar procesos
rápidos de
aprendizaje, ver que los niños aceptan nuestra autoridad, e
incluso elegimos imponer
nuestra opinión, en un asunto u otro. Por un momento tal parece
que lo hemos
logrado, y hemos educado al niño, pero en realidad si no
explicamos, si no fomentamos
un proceso educativo de asimilación, no fue adquirido por el
niño como una
adquisición natural y no perdurará por mucho tiempo. Por
ello, aprenderemos que
hay un camino que es corto pero en realidad es largo, y hay un camino
que es
largo pero en realidad es corto, que realmente hace asimilar en el
joven el mensaje
correcto y lo edifica para estar preparado a enfrentar sus
desafíos actuales y los
que tendrá en el futuro a lo largo de su vida.
Uno de mis hijos estudia en la ieshiva
(centro de estudio) “Jalutzei Dror”, una ieshiva donde
se estudia
Torá y se conjuga con labor agricultora en el oeste del Neguev,
en Jalutza. Los directores del lugar dudaron mucho en cuanto a
permitir
el uso de Smartphone y similares: ¿Acaso prohibirlos en forma
absoluta? ¿O
permitir traerlos, pero con un programa de filtrado? Ellos decidieron
hacer
partícipes a los alumnos del tema, y durante dos semanas
hablaron de ello.
Trajeron Rabanim (Rabinos) y distintos disertadores que
explicaron el
daño de esos aparatos. Hicieron profundas conversaciones con los
alumnos, y
también los alumnos entre ellos – Smartphone con filtrado, o no…
Y la
consecuencia maravillosa y alegrante es que la mayoría de los
alumnos
decidieron que los directores prohíban totalmente la
introducción de los
aparatos a la ieshiva.
De esa forma, en base a la edificación y
profundización y dirección de un proceso educativo, se
llega a un producto
auténtico.
Los
muchachos de los montes
Rav
Shlomó Aviner
Pregunta: ¿Acaso está permitido construir
asentamientos en los
montes u otros lugares en nuestra tierra, cuando no hay permiso del
gobierno
para ello?
Respuesta: El tema se divide en tres:
1. Está
prohibido trasgredir la ley. El gobierno y el Kneset (Parlamento)
tienen
la autoridad de determinar los órdenes en el país, ya sea
como rey – el Kneset
tiene parte de los tributos de rey, como explica el Rav Kuk (Shu”t
Mishpat
Cohen) – ya sea como Tovei HaIr [las personas elegidas por el
público para
tomar resoluciones generales y tienen autoridad para determinar las
cuestiones
del poblado] – no hay diferencia si se trata de la población de
un poblado o la
población del país – ya sea por Dina DeMaljuta Dina [la
ley del rey
tiene vigor] – que también es válido en Eretz Israel (
2. Pero
esa ley no es válida: No se puede impedir de ningún
judío asentarse en
cualquier lugar de Eretz Israel. Por el contrario, el gobierno
es el que
tiene que tomar la iniciativa, y si no lo hace así, no cumple su
cometido. Y
por supuesto que si personas particulares toman la iniciativa,
está prohibido
molestarles. Por supuesto, si esa iniciativa es contraria a
algún programa de
asentamiento gubernamental, como por ejemplo que tiene que pasar por
ese lugar
un camino que será pavimentado en el futuro, o está
planeado construir una
piscina o escuela, por supuesto que el individuo particular debe
respetar esa
ley. Pero en nuestro caso, ¿cuál es la razón por
lo que lo evitan? Argumentando
que esas son tierras que le pertenecen a árabes. Eso es mentira.
¿Cómo es que
de pronto parte de Eretz Israel le pertenece a algún
árabe? David y
Shlomó no eran árabes. Iehudá, el Macabi,
no les entrego esos terrenos,
ni tampoco Bar Kojva. Los romanos conquistaron, y luego llegaron otros
conquistadores, y nuestra tierra pasó de mano en mano, hasta que
llegó a manos
de los turcos, y de ellos a manos de los británicos, y ellos
crearon un estado
que lo llamaron “Jordania” y se lo entregaron a los árabes. Toda
persona recta
entiende que se trata de una cadena de ladrones. Y lo que tienen
algunos árabes
que viven aquí algunas decenas de años, no los hace sus
dueños, por el
contrario, ellos deben pagar renta por esos años en los que
viven allí. Es más,
incluso si se trata de una posesión de mentira, falsificada, en
la práctica los
que se asientan en los montes nunca expulsaron ningún
árabe de su casa, sino
que se comportaron más allá de lo obligatorio, como
explica el Rav Kuk al KKL
(Maamarei HaReaya 252), que se trata de terrenos que pertenecen en
general a
Jordania, que el rey de Jordania entregó en regalo a sus
súbditos. Pero como
hemos dicho, lo cierto es que todos son ladrones: Los turcos, los
británicos y
los jordanos.
Entonces,
hay una contradicción entre la ley de Israel y la ley de
3. Junto
con ello, está prohibido enfrentarse contra las fuerzas de
seguridad, ni
ejército, ni Guardia de las Fronteras, ni policía, ni
servicio de seguridad, ni
Mosad. En general, está prohibido enfrentarse contra
ningún judío. Eso
es el odio gratuito por el que sobrevino la destrucción. Todo lo
que ordenan
las fuerzas de seguridad hay que cumplir, con amor, hermandad, paz y
fraternidad. No oponerse, tampoco ofender. No se trata de
policías turcos o
soldados británicos. Se trata de Am Israel.
“Amarás a tu prójimo como a
ti mismo”.
Meorot
HaShabat
El cometido de esta sección es
familiarizar a los lectores con las pautas básicas del Shabat.
Cada uno
debe aconsejarse con la autoridad rabínica en su comunidad en
cuanto a los
detalles de las numerosas y a veces complejas halajot del Shabat,
y no limitarse a lo escrito en esta sección.
Bishul
Se acostumbra a que cuando se sirve el alimento de las
ollas en que
fueron cocinados a los platos o platos soperos se utiliza un
cucharón o
cuchara. Los poskim (sabios que determinan la halajá)
tienen
diferentes opiniones en cuanto al alimento en el cucharón, si es
considerado Kli
Sheni o Kli Rishón.
Hay quienes opinan que Kli Sheni es sólo cuando el
alimento fue
vertido de la olla en el plato, pero cuando se introduce un recipiente
vacío
dentro de la olla con el que extraen el alimento de ella,
todavía es
considerado Kli Rishón[1].
Por ejemplo: Si la canilla del calentador del agua se estropeó,
si
introdujeron un vaso dentro de él y lo llenaron con agua
caliente, en opinión
de ellos el agua caliente en el vaso es considerada agua de Kli
Rishón,
y no Kli Sheni[2].
Así también en su opinión el
alimento o líquido en el cucharón serán
considerados Kli Rishón, y no Kli
Sheni. Cuando extraen sopa de la olla con un cucharón,
mientras la sopa en
el cucharón está tan caliente que la mano se aparta, no
se podrá verter su
contenido sobre alimentos que no están cocinados previamente,
porque el vertido
de Kli Rishón es capaz de cocinar[3].
De todas formas, si en el plato hay
sopa que fue cocinada y ahora se enfrió, a pesar que está
prohibido volcar
sobre ella sopa hirviente directamente de la olla, porque el vertido de
Kli
Rishón es capaz de cocinar, está permitido extraer
sopa de la olla con un
cucharón y verterlo sobre la sopa que se enfrió[4].
[1](Shuljan Aruj, Orej Jaim 318, Mishná
Brurá
inciso 87. Kaf HaJaim allí, inciso 135. Como el Ta”z en Iore Dea
92 inciso 30,
y Orej Jaim 318 inciso 19). Y sobre todo si deja el cucharón
dentro del Kli
Rishón hasta que se calienta mucho, por supuesto que es
considerado Kli Rishón
(allí).
[2]Y no se debe introducir dentro del vaso con
agua alimentos o líquidos que pueden llegar a ser cocinados. E
incluso los
alimentos que no se cocinan en Kli Sheni como fue aclarado
anteriormente, de
todas formas está prohibido introducir en esa agua, porque es
considerado Kli
Rishón.
[3]Como es aclarado en Ta”z Iore Dea, allí,
que el
cucharón es considerado Kli Rishón también en
cuanto a su vertido.
El que desea introducir
trozos de pan dentro de la sopa o el jugo en el plato, esperará
hasta que la
sopa o el jugo se enfríen hasta que la mano no se aparte, o por
lo menos cuando
extrae la sopa o el jugo de la olla lo hará con un
cucharón o similar, ya que
de esa forma la sopa en el plato será considerada Kli Shlishi, y
así se debe
hacer cuando quiere introducir dentro de la sopa trozos de cebolla o
ajo que no
están cocinados, u otro tipo de alimentos que puede que sean de
los que se
cocinan fácilmente (318, Mishná Brurá inciso 45).
[4](253, Mishná Brurá inciso 84).
A pesar que esos poskim
son más estrictos y consideran el cucharón Kli
Rishón y no se puede verter de
él sobre algún alimento que no está cocinado, de
todas formas tratándose de un
alimento líquido que fue cocinado pero se enfrió, no son
estrictos, y permiten
verter sobre él del cucharón.