Parashat Jaiei Sara 25
de Jeshvan
5776 No
1042
Rav Eran
Tamir
La cualidad de la unión que se encuentra
en el nombre de Jebron [lejaber en hebreo es unir. N. del T.]
se expresa
en todo tipo de fusiones y vínculos. Esta vez hablaremos de un
vínculo muy
especial relativo al nombre de Meharat HaMajpela (
Es muy extraño, ¿por qué fueron
enterrados nuestros patriarcas y matriarcas en el mismo lugar donde
fueron
enterrados Adam y Java? Es más, en
Hay dos virtudes en la persona: Una de
ellas natural humana, que se expresa en el raciocinio y su moral, y la
segunda
Divina, separada, que se encuentra por encima de su naturaleza. Y lo
que es
más, de momento que
Torá
De esto está claro que Adam y Java – que
expresan el nivel natural racional del hombre – y en contraste nuestros
patriarcas y matriarcas que expresan el nivel Divino de la persona,
deberían
ser enterrados juntos, en un mismo lugar, para enseñarnos la
necesidad del vínculo
entre ellos. Pero también está claro que Adam y Java
fueron enterrados abajo,
mientras que los patriarcas y las matriarcas arriba, porque
Ese es el secreto doble de Meharat
HaMajpela y el secreto de Jebron, que vincula esos dos niveles
juntos según
el equilibrio correcto. Como dice al final de sus palabras: “El Primer
Hombre
solo comprendía en él el aspecto del raciocinio humano
general en su plenitud…
y en contraste, los patriarcas y matriarcas prepararon el alumbrado de
Rav
Shlomó Aviner
Hay una nueva moda en los últimos
tiempos: Ver las 613 mitzvot como si fuesen 613 problemas, en
vez de
verlas como 613 caminos de felicidad y luz. Cuando decimos una nueva
moda, nos
referimos a los últimos 300 años, o incluso 500
años, y por supuesto los
últimos 100 años.
Esa tendencia cambia de vestimentas de
tiempo en tiempo, de momento que la persona ve las mitzvot como
problemas que le molestan en la vida, y por lo tanto hay varias
reacciones
posibles:
1. La más severa: Anulación de todas las mitzvot.
2. Menos severa: A veces anular, a veces
cumplir.
3. Anulación de parte de las mitzvot.
4. Buscar una determinación falsa de la halajá,
que se apoya en razonamientos torcidos para anular parte de ellas.
Y si las mitzvot no son un ideal
en la vida, ¿cuál es entonces el ideal de la vida? –
¡la cultura occidental,
que en realidad es una descendiente de la cultura griega! ¿Y
qué dice esa
cultura? Disfrutar todo lo que se pueda. El mundo fue creado para
satisfacer
los placeres. Entonces, hay 613 problemas. Como se expresa a veces la
juventud:
“De momento que soy religioso, me pierdo cosas”. O como dijo una vez un
judío
con kipa que va al rezo pero vive en forma prohibida: “Yo
cometo una
trasgresión determinada, y yo sé que tengo un problema
con la halajá”.
Para él, la halajá es un problema, y él
continúa viviendo de esa forma a
pesar de ese problema.
Por supuesto, de momento que se
transforma en una concepción, es mucho más severo. Los sfaradim
(provenientes
de comunidades del Norte de África y otros lugares) cuando
cometían trasgresiones,
sabían que no era correcto, y los caminos del arrepentimiento
estaban abiertos
delante de ellos. En contraste, los ashkenazim (provenientes
de
comunidades en Europa) cometieron trasgresiones y las justificaron con
ideologías.
Una vez llegó una persona al Gaón
(genio del estudio de
Entonces, lo diremos otra vez: Las 613 mitzvot,
como está escrito en el libro Zohar, son 613 consejos
del rey para para
ser merecedores de vincularse con Él, deleitarse con Él,
alcanzar la felicidad
Divina.
Las 613 mitzvot son 613 miembros
espirituales de la persona.
Quizás dirá la persona: Entonces, ¿por
qué no sentimos felicidad? Respuesta: Porque nuestra naturaleza
no es sana,
como dice el Ramba”m (Shmona Prakim cap. 2), que el enfermo
siente que
lo amargo es dulce y lo dulce lo siente amargo.
La solución es sanear nuestra naturaleza,
a través del estudio de